Bilbao, una ciudad que va mejorando
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jmll1964
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Acerca de:Bilbao
Ventajas:Va mejorando su aspecto
Desventajas:Aún tiene rincones un tanto "feos"
Hola de nuevo, amigos de Xakia:
En el año 2002 años hicimos un recorrido por el norte de la península, comenzando por la Comunidad Autónoma de Cantabria, hospedados en la incomparable localidad de Santillana del Mar (seguramente uno de los pueblos más hermosos de España). Tras una semana recorriendo tierras cántabras, posteriormente estuvimos 3 días en Bilbao, en un hotel junto al Nervión, en la mejor zona de la capital del Bocho.
Sabíamos que Bilbao era la mayor ciudad del Pais Vasco, que era una ciudad eminentemente industrial y naviera, y con fama de no ser una ciudad bonita.
Nosotros vimos una ciudad muy animada, en plenas fiestas de la Aste Nagusia, con mucha vida y actividades lúdicas.
Cuenta Bilbao con un casco antiguo pequeño pero con puntos de interés conocido como las 7 calles, con 7 "kaleas" o calles peatonales en las que destaca una pequeña pero digna de visitar catedral gótica. Se puede comprar en sus tiendas y tapear los excelentes pintxos.
Ya saliendo hacia el Nervión, vemos el Teatro Arriaga y cerca de allí el Ayuntamiento, y un poco más allá en la orilla izquierda de la ría el espectacular Museo Guggenheim, uno de los emblemas de esta ciudad y que se ha convertido en el principal reclamo turístico. Enfrente de ellas y en lo alto de la montaña se levanta la Basílica de Begoña, con unas excelentes vistas sobre la ciudad
En la otra orilla está el Ensanche, la zona de expansión de esta ciudad por la orilla izquierda de la ría en el siglo XIX. Destaca la Gran Vía, con sus edificios de línea modernista de principios del siglo XX, donde vivía (y en parte vive aún) la burguesía industrial y naviera de la ciudad, los de los antiguos altos hornos, los de los astilleros, etc. Es el Bilbao señorial, elegante, de la burguesía.
No podía faltar tampoco la visita a otro de los símbolos del Bocho, la otra Catedral de Bilbao, que no es otra que el emblemático estadio de San Mamés. Lamentablemente aquel día estaba cerrado y no pudimos visitarlo.
La gente bilbaína nos pareció seria, pero muy amable y educada, y muy atenta para ayudar a los visitantes para orientarse por una ciudad de la que se encuentran muy orgullosos.
Más allá de los habituales tópicos negativos sobre la fealdad de la ciudad, del clima lluvioso o sobre las circunstancias políticas vigentes desde hace años descubrimos un Bilbao renovado, que quería abrirse a los visitantes, con nuevos símbolos como el Guggenheim y una vieja ciudad que se ha remozado y trata de ponerse al día, con obras como el nuevo metro o el euskotren (que obviamente no estaban cuando fuimos). Todavía se veían rincones un tanto "feos" o descuidados pero me consta el esfuerzo de los bilbaínos de ir embelleciendo poco a poco su ciudad y hacerla más interesante para el visitante.
En mi opinión, escrita 8 años después de mi visita a dicha ciudad, Bilbao merece al menos dedicarle un par de días para disfrutar de sus calles, sus monumentos, su comida y sobre todo conocer una gente que es un tanto seria pero también acogedora, amable y muy atenta con el forastero. Además Bilbao es una base desde la cual se pueden visitar otros puntos de interés especialmente en la provincia de Vizcaya.
Gracias por leerme y un saludo a todos.
En el año 2002 años hicimos un recorrido por el norte de la península, comenzando por la Comunidad Autónoma de Cantabria, hospedados en la incomparable localidad de Santillana del Mar (seguramente uno de los pueblos más hermosos de España). Tras una semana recorriendo tierras cántabras, posteriormente estuvimos 3 días en Bilbao, en un hotel junto al Nervión, en la mejor zona de la capital del Bocho.
Sabíamos que Bilbao era la mayor ciudad del Pais Vasco, que era una ciudad eminentemente industrial y naviera, y con fama de no ser una ciudad bonita.
Nosotros vimos una ciudad muy animada, en plenas fiestas de la Aste Nagusia, con mucha vida y actividades lúdicas.
Cuenta Bilbao con un casco antiguo pequeño pero con puntos de interés conocido como las 7 calles, con 7 "kaleas" o calles peatonales en las que destaca una pequeña pero digna de visitar catedral gótica. Se puede comprar en sus tiendas y tapear los excelentes pintxos.
Ya saliendo hacia el Nervión, vemos el Teatro Arriaga y cerca de allí el Ayuntamiento, y un poco más allá en la orilla izquierda de la ría el espectacular Museo Guggenheim, uno de los emblemas de esta ciudad y que se ha convertido en el principal reclamo turístico. Enfrente de ellas y en lo alto de la montaña se levanta la Basílica de Begoña, con unas excelentes vistas sobre la ciudad
En la otra orilla está el Ensanche, la zona de expansión de esta ciudad por la orilla izquierda de la ría en el siglo XIX. Destaca la Gran Vía, con sus edificios de línea modernista de principios del siglo XX, donde vivía (y en parte vive aún) la burguesía industrial y naviera de la ciudad, los de los antiguos altos hornos, los de los astilleros, etc. Es el Bilbao señorial, elegante, de la burguesía.
No podía faltar tampoco la visita a otro de los símbolos del Bocho, la otra Catedral de Bilbao, que no es otra que el emblemático estadio de San Mamés. Lamentablemente aquel día estaba cerrado y no pudimos visitarlo.
La gente bilbaína nos pareció seria, pero muy amable y educada, y muy atenta para ayudar a los visitantes para orientarse por una ciudad de la que se encuentran muy orgullosos.
Más allá de los habituales tópicos negativos sobre la fealdad de la ciudad, del clima lluvioso o sobre las circunstancias políticas vigentes desde hace años descubrimos un Bilbao renovado, que quería abrirse a los visitantes, con nuevos símbolos como el Guggenheim y una vieja ciudad que se ha remozado y trata de ponerse al día, con obras como el nuevo metro o el euskotren (que obviamente no estaban cuando fuimos). Todavía se veían rincones un tanto "feos" o descuidados pero me consta el esfuerzo de los bilbaínos de ir embelleciendo poco a poco su ciudad y hacerla más interesante para el visitante.
En mi opinión, escrita 8 años después de mi visita a dicha ciudad, Bilbao merece al menos dedicarle un par de días para disfrutar de sus calles, sus monumentos, su comida y sobre todo conocer una gente que es un tanto seria pero también acogedora, amable y muy atenta con el forastero. Además Bilbao es una base desde la cual se pueden visitar otros puntos de interés especialmente en la provincia de Vizcaya.
Gracias por leerme y un saludo a todos.
Fecha:15:29:30 05/12/10
Edición:15:31:19 05/12/10
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Votos:no disponible.
Categorías:Viajes
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