Uno de los hoteles de Tarragona que más me gusta es el Hotel Astari, que está en la Vía Augusta, una calle bastante próxima a las playas de la ciudad.
Nosotros nos alojamos en este hotel en una ocasión que íbamos a Por Aventura. El hotel está a unos 10 kilómetros.
No se trata de un hotel muy grande. Tiene sólo 81 habitaciones, todas decoradas con un estilo bastante moderno.
Nuestra habitación era exterior, como todas las del hotel, con vistas al mar. Era un cuarto grande, en el que estuvimos como en casa. El cuarto de baño tenía bañera, cosa que yo valoro mucho porque no soy capaz de vivir sin mis baños relajantes, ducha, secador de pelo, kit de aseo completo. También disfrutamos en nuestra habitación de comodidades como televisor de plasma, teléfono, caja fuerte, minibar, conexión gratis a Internet,...
La conexión a Internet cubría todo el hotel y en todas las esquinas era gratis.
El hotel estaba muy limpio, pese a que aceptan mascotas. Yo huyo de los hoteles en los que aceptan animales. Tengo malas experiencias, sobre todo cuando llevé a la niña. Quiero tranquilidad y, sobre todo, limpieza. Casi me sorprendí de que los ascensores no olieran a perro.
Tanto la comida como los desayunos eran tipo buffet. No fue un gran desayuno. Poca variedad y cantidades medidas. Lo mejor era que te lo podías tomar al lado de la piscina, una piscina preciosa, nada masificada.
La fachada del edificio deja bastante que desear. Es mejor el interior del hotel. Os dije que las habitaciones tienen todas balcón. Sólo una pequeña terraza en la que te dejan unas sillas de plástico baratas. Menos mal que la cama era cómoda y el aire acondicionado no se hacía notar con el ruido. En las sillas del balcón no descansabas; te levantabas con el trasero molido de lo duras que eran.