Acerca de:Hotel Villa Mazarin [París]
Ventajas:En mi caso que fué gratis
Desventajas:No le veo ninguna
Hotel Villa Mazarin, situado en la calle Rue des Archives, en pleno centro de París y considerado de cuatro estrellas es el hotel que tuve la suerte de conocer de manera gratuita gracias a Disney Channel y Peugeot 5008; gané cuatro noches en régimen de alojamiento y desayuno así que os contaré cómo es y cuál fué mi experiencia aunque no me costara nada. Lo compartí con mi hermano y dos amigas así que os podéis imaginar el cachondeo en las habitaciones y el resto del viaje.

- ¿Cómo son sus habitaciones?

Empezaré por decir que tiene cinco plantas y cada una de ellas tan sólo siete habitaciones por lo que es bastante pequeño en comparación a cualquier otro hotel situado en pleno centro de París.

Cada una de ellas es de un color y a su vez las moquetas, cuadros y cortinas de ese mismo; en mi caso estuve en la azul (la tercera planta) y lo más sorprendente nada más llegar son las llaves que no son las tarjetas de ahora sino una normalita pero con una chapa grande donde pone el número de tu habitación y un pompón del color de tu planta.

Al llegar a la puerta y entrar (he de decir que el resto de la decoración es en blanco) nos encontramos con una pequeña recepción donde tenemos un lavabo, una jarra eléctrica y un surtido de chocolatinas, turrones y cafés con azúcar para que te puedas preparar lo que quieras (esto sin coste alguno). En la parte baja encontramos la típica nevera pequeñita con cuatro botellas de agua, dos de cava y dos de refresco que si que te cobran sin falta alguna.

Cuando seguimos entrando nos encontramos con la cama (en mi caso de matrimonio) perfectamente hecha, con almohadas, cojines y dos albornoces para tu estancia; mesitas a ambos lados con lámpara cada una y un teléfono en la parte de la izquierda.

Cuando giramos a la izquierda nos encontramos con la puerta del baño y dentro de este toda clase de jabones, toallas y demás complementos para una ducha o baño relajante.

Justo enfrente teníamos una mesa redonda y dos sillas con libretas y bolígrafos así como un libro con la información del hotel y las ventajas que este posee y nuevamente a la izquierda una cómoda donde guardar la ropa durante tu estancia con un espejo super grande.

En total la habitación medía alrededor de los 20-22 metros cuadrados, un lujo, sobre todo si se trata sólo de dormir y por el módico precio de 0 euros; eso sí en la puerta (por dentro) teníamos un cartel plastificado con las indicaciones que debíamos seguir en caso de incendio y con los precios de alojamiento (300 euros la nuestra y 225 la de mis amigas) y comidas (12 euros desayuno, 30 comida y 25 cena) que no llevan ni bebidas ni i.v.a incluído.


- ¿Cómo son sus desayunos?

Como queríamos aprovechar el día al máximo, bajábamos a desayunar a las 8 de la mañana, cuando no había nadie y toda la bollería está recién hecha.

Nada más llegar tenías que dar el número de tu habitación y te sentabas donde tu querías (mesas para dos personas); un lugar que aparanteba ser una cueva con piedras e iluminada con velas y luces rosas.

En nuestro caso el desayuno constaba de:
- vaso de leche o café en taza del mismo color que tu habitación y con una cucharilla muy graciosa ya que era de esas que se pueden apoyar en el borde sin que se caiga.
- un zumo de frutas o naranja recién hecho en jarra de cristal aunque te servían dos vasos altos de forma curva.
- un panecillo redondo (parecido al chapata).
- tres tipos de bollería (diferentes cada uno de los días) aunque no faltaba el croissant.
- botes de mermelada de dos sabores y miel.
- yogur griego en tarrina de barro.
- un bol con azucarillos.

Vamos impresionante y que llenaba muchísimo. Valía la pena pagar 12 euros (si lo tuviera que pagar)


- ¿Cómo era el personal?

Empezando por la recepción y terminando por los camareros mi impresión fué bastante buena aunque he de decir que sólo te atendían en francés o inglés (suerte que yo dominaba el primero y mi amiga el segundo).

Fueron super simpáticos y agradables, de hecho cuando no sabíamos como decir algo nos mostraban papel y boli o un diccionario así que sólo puedo darles un 10 como nota final por lo bien que se portaron con nosotros.

Además nos hicimos fotos con casi todos y no pusieron trabas en ningún momento.


- ¿Cómo era el hotel y su distribución?

Como he dicho al principio es de cinco plantas y siete habitaciones en cada una y decorada de un color diferente. Se puede acceder a las habitaciones por escalera (que no recomiendo porque es en redondo y son muchas) o por ascensor (de esos que entras por una puerta y sales por otra).

La recepción es pequeña pero con alfombra roja desde la entrada y un pequeño mostrador a la izquierda donde te atienden para darte las llaves y si tienes alguna duda (como en nuestro caso que nos hacía falta un mapa).

Si seguimos entrando nos encontramos con una terraza donde comer o cenar con mesas y sillas de madera que arreglaban con manteles, velas y cubiertos en el momento en el que te sentaras. En nuestra estancia no lo pudimos utilizar porque llovieron dos días.

Por lo demás puedo decir que los pasillos eran espectaculares porque estaban decorados de maneras distintas, así en nuestra planta teníamos cuadros en tonos azules totalmente abstractos, un sillon azul (como no...) con espejo en forma de sol y papel pintado en las paredes de diferentes tonos azules; a simple vista parece agobiante y super cargado pero para nada, quedaba bien y no daba dolor de cabeza (por tanto azul digo...).


- ¿Qué tenemos cerca?

Pues nada más salir a mano derecha tenemos la parada del metro que nos llevará a la torre Eiffel, el museo el Louvre, al Moulin Rouge, etc (todo esto si no queremos andar).

De frente tenemos el Sena en todo su esplendor porque es precioso y cruzándolo la conocidísima catedral Notre Dame.

Por los alrededores tenemos un montón de edificios que no son tan conocidos pero que merecen una foto además de la gran cantidad de bares, restaurantes y demás tiendas de regalos y souvenirs para que hagas de tu viaje inolvidable con los detalles que se venden.

Nosotros nos arreglamos la salida antes de llegar y controlando el tiempo y las distancias da tiempo a verlo todo, eso sí, cuatro días no dan para mucho pero para lo importante sí aunque el museo Louvre sólo vimos una décima parte en cinco horas que estuvimos dentro.


- ¿Cuál fué mi experiencia?

Bueno creo que a lo largo de la explicación ha quedado claro de la buena impresión que tuve de este hotel y de lo bien que me lo pasé pero tengo que decir que si realmente el viaje lo hubiera hecho por mi cuenta no hubiera pagado tanto por una habitación ya que creo que 300 euros es demasiado aunque esta valga la pena.

Con respecto a si lo recomiendo o no tengo que decir que sí, si realmente lo quieres en pleno centro y con los monumentos más emblemáticos relativamente cerca, este es el tuyo. Vale la pena gastar ese dinero si lo tienes.

Espero haber servido de ayuda, sólo recomiendo que os hagáis un planning del tiempo que vais a pasar allí y de lo que quereis ver. Un saludo.
Fecha:16:44:29 09/08/10
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Votos:no disponible.
Categorías:Viajes