Unos de mis cruceros favoritos son los Pullmantur Cruceros. Nunca he salido descontenta de estos viajes por el mar en barcos llenos de comodidades y de vidilla.
Lo tiene todo. Desde un camarote lujoso, que nada tiene que envidiar a una buena habitación de hotel, hasta una buena comida o unas animaciones extraordinarias.
Nosotros hicimos uno de estos cruceros por el Pacífico mexicano. Fue una experiencia única, inolvidable. Todas las noches fiestas, buena música, casino. Por el día el barco paraba en lugares tan precisos como Puerto Vallarta. Podías practicar hasta submarinismo.
De la niña podías desocuparte proque había un guardería con personal especializado en el barco. Los niños no se aburrían porque les organizaban muchas actividades.
Todo estaba muy limpio. La piscina, las tumbonas, los camarotes, el restaurante,...
El personal era atento y profesional. Eran muy detallistas con los niños. Iban impecables con sus unformes a todas horas del día y de la noche.
Quedé encantada. Volvería ahora mismo.
Nuestro camarote era amplio. Estaba decorado en tonos crema. Era lujoso, pero no excesivamente lujoso.
Sauna, gimansio, piscinas, jacuzzi en cubierta,... Lo tenías todo en el barco. Hasta peluquería y tiendas.