El Hotel Resort Can Güell es un hotel ubicado en plena naturaleza, en Sant Ferriol, en Besalú.
No nos resultó fácil encontrarlo porque está en medio de los campos y se llega hasta él por un camino sin asfaltar.
El hotel es una casa rural con paredes de piedra y tejado rojo.
Es un hotel lleno comodidades a pesar de estar en un sitio olvidado por la multitud. Tiene parking, piscina, spa, un moderno ascensor...
La decoración conserva elementos de la antigua casona como, por ejemplo, los arcos, las bóvedas del techo y los ladrillos rojizos que recuerdan otras épocas.
Nuestra habitación era amplia. Tenía los suelos de madera. En el cuarto de baño pudimos disfrutar de una hidromasaje y de una ducha sin estrecheces.
Encontré el colchón de la cama muy blando. Me gustó porque yo en casa tengo uno duro por mis problemas de espalda. No viene mal de vez enc audno disfrutarde un colchón blando.
Nuestra habitación daba a una terraza que conectaba otros cuartos.
El hotel es un remanso de paz. En el jardín tumbada en la hamaca te sentías en el séptimo cielo. Al lado tenías una preciosa piscina y silencio, mucho silencio.
El silencio se explica porque el restaurante está ubicado en un edifico aparte del de habitaciones.
Los desayunos fueron muy buenos. Mucha fruta, jamón y otros embutidos, mantequilla, mermeladas, bollería, queso,... No pasamos hambre. Para mí incluso fue excesivo proque yo con un café por la mañana tengo de sobra.