No le recomendaría ni a un enemigo Aegon [Salud]. Te reciben como a una reina cuando vas a darte de alta, todo sonrisas, todo amabilidad. Pronto deja de ser ventajosa. Yo pagaba cada tres meses 150 euros, que ya es pagar por un simple seguro médico. Me quejé del aumento de precio y me contestaron que me cobraban lo habitual para una familia con una niña recién nacida. No quiero ni pensar qué me cobraría si en vez de tener un bebé tuviera quintillizos.
Finalmente decidimos darnos de baja. Un lío. Nos resultó más difícil darnos de baja de Aegon [Salud] que de una empresa telefónica. Me empezaron a decir que teníamos una póliza anual y que había que esperar unos meses. Cuando al fin me vi libre de ellos, casi no me lo creía.
Encima los médicos que más usaba, como el pediatra de la niña, me lo ponían a 60 kilómetros de mi casa.