Bueno, creo que a estas alturas de siglo pocos son los que conocen Avon aunque sea sólo por su mítico " ding, dong, Avon llama". Una marca estadounidense que ya lleva años en el mercado y que como otras muchas se ha renovado para mejor.
Avon, aunque tiene algunas tiendas físicas en España y en algunas páginas extranjeras tiene tienda on line ( como la americana) sigue basando sus ventas en las distribuidoras. Yo tengo la mía en El Perelló, Lola, lo que me ha permitido descubrir una de sus mejores líneas: Spa. Línea basada en productos que tienen un toque exótico y original.
Dentro de ellas hay varias sublíneas, algunas desaparecen como por arte de mágia como es el caso de la línea Greek Sea o la que sacaron con Goji, pero aparecen también nuevas ( como la que contiene flor de Loto de Tailandia que es una delicia) o reaparecen como es el caso de la que contiene Arroz y Sake que desapareció pero que vuelve a venderse.
Esta línea contiene:
- Exfoliante: lo tengo, bueno tenía porque lo acabé ayer, muy bueno.
- Hidratante para el cuerpo que nunca he probado.
- Crema para manos y pies que tampoco he probado.
-Mascarilla que es el objeto de esta opinión.
Esta mascarilla se presenta en un tubo de color rosa clarito que contiene 75 ml que cunden mucho. Es una mascarilla en la que el arroz y el Sake son sus ingredientes principales. Como es habitual en Avon, no hay a penas información sobre el producto ni en su página ni en el catálogo, así que la que os doy se basa en mi experiencia al 100%.
Es una mascarilla limpiadora tipo peel-off pero de las que duelen. Lo que llama la atención es su textura, es un poco pegajosa, es muy densa. Cuando la aplicas en la cara y el escote ( en mi caso) tras limpiar bien la piel con tónico, notas como cuesta extenderla debido a su textura tan densa. Es una mascarilla de un color blanco luminoso.
Cuando la aplicas sobre la cara pareces una Gehisa con todo el rostro blanco. Yo me la aplico y la dejo actuar. Debes dejar que se seque bien porque sino cuesta eliminarla. Notas que está seca del todo por lo tirante que sientes la piel. Para retirala has de levantar un poco de un extremo e ir quitándola poco a poco.
Si la has extendido bien notas como va despegándose de la piel. Ahora ya me he acostumbrado pero duele ya que el tirón se nota. La mascarilla se fija con ganas sobre la piel lo cuál no es malo ya que indica que realmente se está llevando consigo todas las células muertas e impurezas. Tanto el Sake como el arroz tienen una acción astringente por lo que los poros se cierran y el exceso de grasa desaparece.
Para quiénes tengáis la piel un poco seca puede que esta mascarilla no sea muy buena ya que aprecias la piel más seca luego pero no es mala. A mí se me queda la piel muy bien. La notas más suave, lisa y fresca. Además, al llevarse con ella todas las impurezas la acción de la crema que le aplicas luego o el mismo tónico actúan mejor y el aspecto fresco de la piel permanece durante días.
Esto es lo que más me gusta de esta mascarilla. Huele a Sake y arroz. La fragancia no es desagradable pero huele mucho mejor la que contiene Flor de Loto de Tailandia.
Una mascarilla buena. Su precio depende mucho de pillarla o no en oferta. Yo se la compré a Lola en oferta y su precio no llegó a los 4 euros. Sin oferta tampoco los alcanza es cierto.
Así pese a que duele un poco, creo que vale la pena probarla o usarla. Yo no la uso muy seguido sino cuando quiero limpiar profundamente la piel, por lo general una vez cada 15 días para eliminar bien todas las células muertas y darle más vitalidad a la piel algo que se nota al instante. Por cierto, cuando la retiras te da la sensación de que has quitado papel porque se queda con esta textura.