El esmalte de uñas Kiko es un buen esmlate a precio tirado; tres euros, y menos si los ponen de rebajas. Yo de la marca Kiko también compro sombras de ojos, maquillajes, cremas, etc, pero de ninguno de sus productos estoy tan contenta como de este esmalte.
Se comercializa este esmalte en frascos de 11 ml, con tapa de color negro. De todos los colores que venden, me quedo con los tonos rosáceos, los más claritos, que son los que a mí me gustán.
Su gama de colores da para dar y tomar. Tiene 72 tonalidades. Raro será que no encuentres un color que no te guste. Yo encontré hasta colores para carnaval.
Es un esmalte que me aguanta en buenas condiciones la semana completa aunque no tenga mucho cuidado a la hora de fregar. No pasa nada si un día friegas los platos sin guantes, cosa que con los esmaltes de la competencia supone tener que retocarlos como mínimo. He de aclarar que yo siempre me doy dos capas de esmalte.
Pintar las uñas con un esmalte de Kiko es tatea sencilla. Se extiende muy bien con su pincelito.