Feo y lleno de críos
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carolina13
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Incidencias
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Acerca de:Hotel Hipic [Vielha]
Ventajas:Atención al cliente
Desventajas:Hotel de colonias, necesita reforma
El Hotel Hipic es un hotel orientado a grupos grandes pues tiene bastantes habitaciones. De hecho, las dos noches que nos alejamos allí coincidimos con varios grupos de chicos de instituto, con lo que el descanso no fue tal descanso y es que por la noche armaban bastante ruido, aunque tuvimos la suerte de que nos dejaron elegir habitación y nos aconsejaron la que escogimos pues era la que más lejos del barullo estaba.
HABITACIÓN
La habitación era un poco claustrofóbica, no por el tamaño, que era mas que aceptable, sino por la iluminación y la decoración, o más bien, por la falta de ella. Había dos o tres plafones en la pared y una luz en el techo. La ventana daba a la calle, pero las contraventanas de madera no dejaban pasar mucha luz, así que no invitaba a quedarse alí. De todos modos nosotros queríamos el hotel sólo para ir a dormir, no para hacer la vida en él, así que nos pareció aceptable, aunque con varios peros.
Por un lado la cama. Aunque estaba limpia, la ropa de cama estaba algo vieja e incluso encontramos un quemazo, lo que daba aspecto de sucio. Eso sumado a la iluminación insuficiente y a lo anticuado de los pocos muebles, hace que no recomiende este hotel a nadie. Además, al ser un hotel de colonias los gritos por parte de los chavales están garantizados.
El baño compartía esa iluminación un tanto lugubre y esa decoración ausente, aunque también estaba limpio, pero no apetecía estar en él. Y eso que era grande, pero los azulejos del suelo tan anticuados, algunos ajados... nose, me daba como repelús.
INSTALACIONES
Este hotel debe su nombre a que tiene unos establos al lado. Organizan excursiones y cursos, pero no hacen descuento a los que se alojan allí, al menos a nosotros no.
No hay mucho que hacer en el alojamiento. Tiene un bar que es atendido por el mismo personal de recepción, así que un 10 por ellos pero un 0 a los dueños del hotel por duplicar las funciones de su personal. Junto al bar hay una zona de juegos con futbolín, billar y poco mas. Y a esto se limitan las opciones de ocio de hotel.
COMIDAS Y BEBIDAS
Teníamos alojamiento y desayuno, que se servía en el comedor, con toda la panda de adolescentes hambrientos y ruidosos. Un pequeño suplicio añadido a la falta de descanso de la noche.
El desayuno merecía la pena. Un desayuno continental pero en gran cantidad. Zumo, colacao, cafe, magdalenas, croissants y panecillos. Sólo teníamos que aguantar la algarabía de profesores y alumnos.
ALREDEDORES
Otra de las pegas del hotel es la ubicación. Está a las afueras del pueblo, aunque como Vielha no es muy grande tampoco es demasiado problema. Tenemos el centro sólo 10 minutos a pie y si no nos apetece andar podemos mover el coche pues no hay problemas de aparcamiento. Justo delante de la puerta hay aparcamiento gratuito.
Lo bueno es que el sitio es tranquilo. Seguro que se podría dormir muy bien si no estuviera lleno de grupos de adolescentes.
HABITACIÓN
La habitación era un poco claustrofóbica, no por el tamaño, que era mas que aceptable, sino por la iluminación y la decoración, o más bien, por la falta de ella. Había dos o tres plafones en la pared y una luz en el techo. La ventana daba a la calle, pero las contraventanas de madera no dejaban pasar mucha luz, así que no invitaba a quedarse alí. De todos modos nosotros queríamos el hotel sólo para ir a dormir, no para hacer la vida en él, así que nos pareció aceptable, aunque con varios peros.
Por un lado la cama. Aunque estaba limpia, la ropa de cama estaba algo vieja e incluso encontramos un quemazo, lo que daba aspecto de sucio. Eso sumado a la iluminación insuficiente y a lo anticuado de los pocos muebles, hace que no recomiende este hotel a nadie. Además, al ser un hotel de colonias los gritos por parte de los chavales están garantizados.
El baño compartía esa iluminación un tanto lugubre y esa decoración ausente, aunque también estaba limpio, pero no apetecía estar en él. Y eso que era grande, pero los azulejos del suelo tan anticuados, algunos ajados... nose, me daba como repelús.
INSTALACIONES
Este hotel debe su nombre a que tiene unos establos al lado. Organizan excursiones y cursos, pero no hacen descuento a los que se alojan allí, al menos a nosotros no.
No hay mucho que hacer en el alojamiento. Tiene un bar que es atendido por el mismo personal de recepción, así que un 10 por ellos pero un 0 a los dueños del hotel por duplicar las funciones de su personal. Junto al bar hay una zona de juegos con futbolín, billar y poco mas. Y a esto se limitan las opciones de ocio de hotel.
COMIDAS Y BEBIDAS
Teníamos alojamiento y desayuno, que se servía en el comedor, con toda la panda de adolescentes hambrientos y ruidosos. Un pequeño suplicio añadido a la falta de descanso de la noche.
El desayuno merecía la pena. Un desayuno continental pero en gran cantidad. Zumo, colacao, cafe, magdalenas, croissants y panecillos. Sólo teníamos que aguantar la algarabía de profesores y alumnos.
ALREDEDORES
Otra de las pegas del hotel es la ubicación. Está a las afueras del pueblo, aunque como Vielha no es muy grande tampoco es demasiado problema. Tenemos el centro sólo 10 minutos a pie y si no nos apetece andar podemos mover el coche pues no hay problemas de aparcamiento. Justo delante de la puerta hay aparcamiento gratuito.
Lo bueno es que el sitio es tranquilo. Seguro que se podría dormir muy bien si no estuviera lleno de grupos de adolescentes.
Fecha:22:15:45 25/04/12
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Votos:no disponible.
Categorías:Viajes
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