Este hotel pertenece a la cadena de hoteles Formule 1, lo que nos da una idea de lo que nos vamos a encontrar. Habitaciones funcionales, sin baño, para dormir y marchar. No lo recomiendo para muchos días pues resulta demasiado agobiante permanecer mucho tiempo en la habitación, pero me parece una opción de alojamiento mas que aceptable para quienes no quieran gastarse mucho dinero y sólo quieran un lugar limpio para dormir.
Estos hoteles no cobran por persona, yo creo que cobran por habitación,37 euros mas tasas (esas si son por persona), así que las habitaciones tienen el tamaño justo para una cama de matrimonio y una litera arriba.
La chica nos dijo que nos daba una habitación adaptada para minusválidos porque no le quedaban mas y que era más grande que el resto. ¿Cómo serán las otras? Porque en la nuestra quedaba el sitio justo para dejar las maletas y poco mas,
Aparte de las camas, hay un lavabo con toallas de mano y una mini mesa que no es mas que una balda semicircular anclada a la pared con una silla. Lo dicho, para dormir y poco mas. Ah, por lo menos tiene tele y wifi gratis en la habitación, algo de lo que no pueden presumir muchos hoteles de ese tipo de nuestro país. Y la limpieza es impecable, todo relucía. Me dio la impresión de que se trataba de un hotel bastante nuevo porque la ropa de cama estaba muy lustrosa, aunque igual es que renuevan a menudo la lencería.
Incluso el baño compartido estaba en condiciones mas que aceptables, tanto que me aventuré a darme una ducha y eso que suelo ser un poco polilla con los baños, pero también es que aquí llevaba el chip hippie activado, jeje.
El hotel ofrece desayuno buffet a un precio muy asequible. No se si eran 4 euros y no tenía mala pinta, aunque nosotros no lo cogimos ya que queríamos desayunar en la ciudad para aprovechar el día.
Cuenta con aparcamiento propio con capacidad para bastantes coches y menos mal, porque se llenó al completo, aunque por la zona no creo que sea muy difícil encontrar aparcamiento. Está ubicado en un polígono industrial en el que no hay muchas cosas alrededor, básicamente empresas y otros hoteles. No tiene mucha iluminación, pero a la luz del día nos dimos cuenta que a pocos minutos a pie hay un megasupermecado y una zona con muchos restaurantes, que fue precisamente donde cenamos nosotros, sólo que nos ayudamos del gps para llegar.
Sin duda alguna repetiría mi experiencia en el hotel, aunque mejor llevar el gps actualizado porque tuvimos que dar mas vueltas que los caballitos para llegar por hacer caso al navegador. Con lo fácil que hubiera sido simplemente seguir los carteles,,,. y es que está bastante bien indicado.