El NH Calderón de Barcelona es un hotel del que yo destacaría la profesionalidad de sus trabajadores y la buena limpieza que encuentras en todos los rincones del edificio, cuartos de baño incluidos.
El personal te hace sentir como si estuvieras en tu casa. Son amables y eficientes. Todos ellos hablaban varios idiomas.
Nuestra habitación era amplia y tenía terraza. Las vistas desde la terraza eran espectaculares. Lo mismo puedo decir de las vistas que se disfrutaban desde el ático del hotel, que es donde está la piscina.
Este hotel va perfecto para hacer turismo. Es muy céntrico. Puedes ir andando hasta las Ramblas y a todos los sitios de interés turístico.
La decoración es bastante clásica con algún que otro toque de modernidad. Optan por la funcionalidad. La cama de nuestro cuarto, por ejemplo, era grande y tenía un colchón muy cómodo.
Pero no todas son ventajas. Me disgustó tener que pagar un extra por la conexión a Internet. Me clavaron 20 euros al día. Un dineral. Casi me sorprendió que no nos cobraran también extra por el minibar.
Este hotel te sale muy caro, pero vale la pena alojarse en él porque te ofrece unos buenos servicios y tiene una ubicación fantástica para hacer turismo por la Ciudad Condal.