Me regalaron este producto al comprar el champú y creo que me va a durar eternamente porque apenas lo uso.
La razón es porque a mi me gusta llevar el pelo al natural, bien peinadito con la plancha o las tenacillas. Los productos de acabado me da la impresión de que manchan el pelo y por eso no suelo usarlos.
Esta gomina la uso los días que me hago coleta y mis pelos están especialmente rebeldes, es decir, esos días en los que aunque te hayas planchado el pelo algunos parecen ir por libre, como si hubieras metido los dedos en un enchufe y estén todos electrizados. Es entonces cuando uso gomina o laca, pero prefiero el Wet Look de Fructis porque no es nada pesado ni pegajoso.
Si que consigues que el pelo se quede donde está, eliminas esa especie de electricidad estática y resulta muy fácil de trabar ya que no es nada denso. Es una textura en gel, incoloro y con un marcado olor cítrico.
El pelo queda bastante suelto, fácil de peinar y no quedan residuos.
Lo del efecto mojado es si echas mucha cantidad. A mi eso no me gusta pues es precisamente usando mucho cuando el pelo queda como muy pegado. Es verdad que mucha gente utiliza la gomina para marcar mucho un peinado, pero yo sólo la quiero para evitar que mi pelo luzca encrespado y esta es una de las gominas mejores que he encontrado precisamente porque su fijación es muy suave y apenas notas diferencia en la textura que deja en el pelo.