Hay bronceadores que resultan muy prácticos, como es el caso del Comodynes Instant Tanning One Day Color que estoy utilizando estos días. Es un bronceador fácil de aplicar, que me deja un bronceado uniforme y que elimino con agua sin ningún problema.
Lo aplicas rápido gracias a la toallita en que viene. Nada más abrir el paquete notas su olor como a caramelo. No me gusta nada su olor. Deberían modificarlo para que no resulte tan cargante.
La ventaja de este bronceador es lo rápido que te lo aplicas. Es ideal para poner cuando quieres salir a cenar o asistir a un evento profesional o familiar con algo de color en tu piel. Sólo tienes que pasarte a toallita por el escote, brazos y piernas dando un suave masaje. Te deja un color uniforme que no es nada artificial A mí me preguntaron el otro día si ya iba a la playa. Les parecía que mi bronceado era natural.
Para quitarlo sólo tienes que ducharte. Te das una buena ducha y adiós bronceador. Quedas con la piel tan blanca como la tenías. Que nadie piense que si no te duchas te vas a quedar bronceada para el día siguiente. Este bronceador tiene una duración de un día sólo. Después se te va yendo aunque no te laves, cosa que hay que hacer por supuesto. Si al día siguiente quieres más bronceado, puedes volver a aplicarlo.
No te sale nada barato broncearte con el Comodynes Instant Tanning One Day Color todos los días. Cada paquete trae sólo 8 toallitas y cuesta 8,20 euros. Es más barato tomar el sol en la playa aunque pierdas un tiempo que pudieras dedicar a otras cosas.
En todo caso, os lo recomiendo. Para salir de u apuro es genial. Yo recurro mucho a este Comodynes Instant Tanning One Day Color cuando quiero salir en plan guapa y estoy más blanca que las botella de leche del Mercadona.