¡¡Buenas a todos!!
Como muchos de vosotros ya sabéis en el pasado puente del Pilar elegimos la ciudad de Oviedo para alojarnos en ella con la intención de ver las ciudades de Oviedo y Gijón. Entre todos los hoteles que quedaban, éste me llamó la atención y os vengo a contar mi experiencia con el hotel Barceló Oviedo Cervantes.
CARACTERÍSTICAS
El hotel Barceló Oviedo Cervantes es un hotel que se encuentra situado en la ciudad de Oviedo, perteneciente a la comunidad autónoma de Asturias. Se trata de un hotel que cuenta con una categoría hotelera de 5 estrellas.
Se ubica exactamente en la calle Cervantes, 13 y dispone de una página web oficial la cual es https://www.barcelo.com/es/hoteles/espana/oviedo/barcelo-oviedo-cervantes/ y un teléfono de atención al cliente el cual es 985 255 000.
Se sitúa a 30 kilómetros de la playa, a 5 minutos de la calle Uría y del centro de la ciudad y a 55 kilómetros del aeropuerto de Asturias.
En su interior se reparten un total de 72 habitaciones que están dotadas de servicios tales como internet mediante conexión wifi totalmente gratuito, servicio de habitaciones las 24 horas, ducha con efecto lluvia, carta de almohadas y esencias, televisión y minibar, entre otros.
Entre los servicios que nos encontramos en el hotel disponemos de: restaurante, sala de conferencias, recepción las 24 horas, bar o servicio de lavandería, entre otros muchos.
MI EXPERIENCIA PERSONAL
Casi sin improvisar, decidimos aprovechar la vida y disfrutar del puente del Pilar e irnos a algún sitio para desconectar. Decidimos irnos a Asturias ya que ambos habíamos estado pero llevábamos ya muchos años sin ir, y Asturias nos encanta. Miré hoteles en Gijón y en Oviedo y me salió éste por un precio bastante asequible así que reservé.
Lo hice a través de su página web porque me ahorraba algo de dinero en comparación con otras webs de reservas de hoteles. Al final lo que decidimos fue reservar alojamiento y desayuno con la comodidad de no tener que buscar un local por las inmediaciones para desayunar.
Según llegamos al hotel, en el exterior tienen un pequeño trozo en la carretera reservado para dejar el coche 15 minutos para bajar las maletas. Enseguida salió el chico de recepción a ayudarnos con las maletas y con el carrito de bebé, un chaval muy educado y amable que nos ayudó con las maletas a subirlas por las escaleras del exterior.
Aunque en la fachada del hotel, en la puerta principal tiene escaleras para acceder al hotel, por la parte del parking se puede acceder al hotel con carrito de bebé o silla de ruedas para no tener que subir las escaleras o cargar con peso.
Ubicación
La ubicación del hotel me parece estupenda ya que se encuentra muy cerca del centro de la ciudad, de numerosas atracciones turísticas y de la calle principal de compras, la calle Uría. Se ubica en una calle que tiene aparcamiento de zona azul, por lo que los días laborables hay que pagar por aparcar, aunque si no quieres aparcar en la calle el hotel dispone de parking con un coste adicional.
A muy poca distancia del hotel se encuentra la calle Uría, el parque del Campo de San Francisco o la Ruta de los Vinos.
Recepción
La zona de recepción se encuentra nada más acceder por las escaleras a mano derecha. Se trata de una recepción grande y con un diseño muy moderno todo en orden y en perfecto estado. Me llamó la atención porque había una máquina de agua disponible en el caso de tener sed después del viaje.
Al fondo desde la recepción, se encuentra la sala del desayuno o el restaurante y por detrás de la recepción se encuentra el bar, éste nuevamente con un diseño muy moderno.
En la recepción, como regalo de bienvenida nos dieron un vale canjeable en el bar por unas copas de champán o cava que más adelante disfrutamos.
Habitación
La habitación que nos tocó exactamente fue la 205, en el segundo piso. Según salías del ascensor, a mano derecha podíamos acceder a nuestra habitación.
Era una habitación bien grande, bien maja con un diseño que nunca antes había experimentado. La habitación y el baño están totalmente abiertos, es decir, no hay una pared que los separe y desde el lavabo puedes ver la cama y viceversa. La zona del retrete se encuentra como en una cabina con los cristales opacos al igual que la ducha, pero el resto está abierto.
Está dotada de retrete, ducha, armario abierto con cajones, televisión de pantalla plana, minibar con bebidas dentro, caja fuerte y la cama. Como regalo de bienvenida teníamos en la habitación dos manzanas bien verdes y dos barritas de cereales además de una botella de agua.
Las vistas de la habitación no eran muy bonitas ya que daban a un patio interior, por detrás de viviendas particulares pero la habitación era una auténtica pasada. La cama era enormemente enorme perfectamente hecha con varios cojines y teníamos una cuna para el bebé.
En la zona del lavabo, teníamos frascos de gel, champú y loción para el cuerpo además de varias pastillas de jabón de manos y un secador en la parte de abajo. También disponía de un espejo grande y otro de aumento.
En la zona del armario teníamos dos albornoces blancos con sus respectivas zapatillas y nos habían dejado una bañerita pequeña para bañar a nuestro hijo, ya que íbamos a estar durante varios días alojados.
La zona de la ducha era como una cabina con la posibilidad de disfrutar de diferentes chorros de la ducha. Tenías la opción de que el agua saliera por varios sitios a la vez, por la alcachofa, por la pared o desde el techo, con un efecto lluvia. La ducha era para mi muy relajante.
Desayuno
Como os he comentado al principio, reservamos la habitación con desayuno incluido y es la mejor idea que tuvimos porque el desayuno era una pasada. Tiene lugar abajo, al lado de la recepción y su horario era de 7:00 a 10:30 horas de lunes a viernes y de 8:00 a 11:30 horas los fines de semana.
Según entras a la zona de desayuno tienes un montón de mesas para elegir pero luego también tienes un montón de cosas para elegir para desayunar. Mira que he estado en hoteles pero en este hotel, su desayuno era de lo más completo.
Tenías la zona de bollería con donuts, donnettes, tartas y demás, también tu zona de pan o tostadas con la tostadora al lado, diferentes tipos de mermelada, frutos secos, yogures, yogures líquidos, zumos recién exprimidos, quesos, zumos detox, fiambre, fruta ya cortada, Nesquik, Colacao, cereales y la opción de que el propio cocinero te hiciera algo al momento. Podías elegir entre tortillas, crepes, tortitas y sanwitch y te lo llevaban ellos una vez hecho a tu mesa.
Estaban continuamente reponiendo cosas y lo que más me llamó la atención fue el excepcional trato con nosotros, lo bien que se portaban en todo momento, lo simpáticos que eran. Un trato excepcional.
Comida
Uno de los días la verdad que pasábamos de buscar un sitio donde comer y llamamos al hotel a ver si podíamos comer allí, nos dijeron que sí, así que para allí que fuimos.
Nos atendieron en la misma sala de desayuno y estaban algunos de los trabajadores que estaban también durante el desayuno. Disponía de la opción de menú del día y es lo que pedimos. Había un total de cinco platos diferentes para elegir. Nos pusieron como entrante una pequeña brocheta de langostino y pescado. Una brocheta fina, perfectamente cocinada.
Posteriormente nos trajeron los primeros platos entre los que pedimos una ensalada de rulo de cabra y un arroz meloso con pulpo. Personalmente no sé de qué tipo era el rulo pero se notaba un rulo diferente, la ensalada estaba perfectamente aliñada y traía de todo y el arroz con pulpo me pareció fino, en su punto y totalmente exquisito.
En los segundos platos aprovechamos para pedir carne con salsa roquefort y pimientos del padrón y una merluza. Nuevamente unos platos bien cocinados, bien preparados y muy buenos.
Pero ya en el postre rematamos la jugada. Pedimos un arroz con leche y un coulant de chocolate con helado. El arroz con leche tenía una fina capa caramelizada por encima y estaba de muerte, y el coulant venía perfectamente emplatado, fino y con un sabor excepcional.
La verdad que no pudimos hacer mejor elección que comer en el hotel porque absolutamente todos los platos estaban especialmente buenos y buen preparados. El importe del menú nos lo cargaban en la habitación pero tenía un precio de 18,50 euros.
Bar
El bar, como os he dicho, se ubica detrás justo de la recepción. Lo usamos una noche en particular para usar el vale que nos dieron como recibimiento en la recepción el primer día en el que incluía una copa de champán o cava.
La decoración del bar, acorde con el resto del hotel, muy moderno y con un espacio bien amplio. Teníamos nuestra zona de sofás grandes o una zona con sofás individuales. Lo que más me llamó la atención aquí es que cada mesa tenía un botón para pulsar para que fueras atendido. Uno de llamar a la camarera, otro de pagar y otro que ahora mismo no recuerdo. Además en cada mesa había una carta para elegir diferentes tipos de cubatas.
La atención en el bar, nuevamente excepcional. En vez de pedir cava o champán que ese día no nos apetecía, le preguntamos si podíamos pedir un café y un refresco y sí pudimos canjearlo por eso.
CONCLUSIÓN
Creo que pocas veces me he alojado en un hotel de cinco estrellas pero la experiencia para mi ha sido excepcional. Después de todos los días que nos alojamos considero que no han fallado en nada, que todo estaba en orden y la atención ha sido exquisita desde el principio hasta el fin.
El precio de alojarnos tres noches con desayuno incluido y dos adultos y un niño fue de 396,26 euros. Después de todos los servicios que tiene y todo lo que vivimos en el hotel considero que tienen una buena relación calidad-precio.
Se me había olvidado comentaros que a la hora de hacer la reserva desde su página web se me incluyó un vale de 20 euros a gastar en cualquier cosa del hotel. Nosotros particularmente los usamos para descontarnos el precio el día que decidimos comer en el hotel.
Por todo lo comentado es un hotel que os recomiendo totalmente y no creo que os vayáis a arrepentir. Por el precio que nos costó, en Oviedo, un cinco estrellas y tan cerca del centro, no está nada mal.
Un saludo a todos.