Nos alojamos en el Vincci Málaga porque es un hotel moderno a pie de playa. Es perfecto para pasar unas vacaciones de sol y playa con niños que se niegan a andar. Sales del hotel y te metes en la playa. Todo un lujo.
También fue un lujo para mí encontrar una habitación amplia, decorada con gusto en tonos blancos y muy luminosa. Eché de menos un escritorio más grande. Pero es un problema que suelo tener en todos los hoteles cuando tengo que compartir el lugar de trabajo con mi marido. Lo demás era perfecto, empezando por unas maravillosas vistas al mar.
Me gustó mucho la decoración elegante de color blanco con detalles ornamentales de color negro y verde de la habitación. También me gustó disponer de carta de almohadas. Soy una maniática de las almohadas. Nunca sé qué almohada me va bien. Tuve almohadas de sobra para elegir. Mi marido se quejaba de tanto cambio de almohada, pero una es como es. De lo que no se quejaba mi santo era del minibar. Estaba tan bien surtido que te olvidabas de bajar a tomar algo al bar del hotel. El baño, de mármol, estaba impecable. Lo encontré incluso más limpio que la habitación. En el baño había un secador de pelo que funcionaba a las mil maravillas.
No debes perderte el desayuno. El hotel sirve todos los días un desayuno bufé continental con platos dulces y salados al gusto de todos los paladares. Hay donde escoger comida a primera hora de la mañana, cosa que agradecen los estómagos hambrientos. Además tienen comidas alternativas para celíacos. Mi hija mayor pudo desayunar sin problemas con nosotros. También frecuentamos bastante la cafetería de este hotel. La cafetería del Vincci es elegante y dispone de una terraza al aire libre ideal para tomar algo al fresquito de la tarde-noche malagueña.
Os recomiendo este hotel. El Vincci Málaga está situado en el paseo marítimo de Málaga, una de las mejores zonas de la ciudad, y goza de unas vistas magníficas a la playa de San Andrés y al mar Mediterráneo. La playa estaba muy limpia. Yo llevaba todos los días que estuvimos por allí a las niñas. No me gusta que estén siempre metidas en la piscina.