El poder de la presencia de Daniel J. Siegel y Tina Payne Bryson es un libro que busca el éxito de El cerebro del niño, el anterior libro de los autores. Dudo que lo tenga. La gallina de los huevos de oro no nos hace siempre de oro.
Este nuevo libro viene a ser un manual de cómo criar un hijo o hija sin perder la paciencia. Empieza diciéndonos que nos vamos a equivocar muchas veces. No existe el padre ni la madre perfecta. Lo importante es estar presentes. Irás al colegio a hablar con los profesores, escucharás a tus hijos, los ayudarás con los deberes, los enseñarás a ser buenas personas.
Los autores intentan hacerte reflexionar sobre cómo has sido criada tú. A partir de ahí vas a sacar ideas para criar a tus vástagos. Así llegan a los apegos inseguros. Son importantes. Los apegos inseguros van a influir en el desarrollo del niño y en el adulto que será. Ten cuidado con tus inseguridades. Se las transmites a tus hijos.
Clasifican los apegos inseguros en:
-Apego evitativo. Indiferencia ante las necesidades del niño.
-Apego ambivalente. A veces respondes a las necesidades del niño y otras veces no respondes.
-Apego desorganizado. Tienes graves faltas de sintonía con las necesidades del niño. Esto es preocupante. Estás para hacértelo mirar porque todos nacemos con impulso de conexión.
Estos apegos inseguros los tenemos porque nos los transmitieron nuestros padres. Gracias al libro de Daniel y Tina podremos eliminarlos. Vamos a romper el ciclo. Yo estoy en ello.
Os recomiendo El poder de la presencia. Como bien dicen en el libro, un niño tiene que sentirse seguro, visto, consolado y a salvo. No debes perderte los consejos que nos ofrecen los autores para las situaciones cotidianas. Sabrás qué hacer cuando tu niño tiene una pataleta. Te recuerdan que no debes pegarle. No pierdas los estribos. Ni les pegues, ni los mimes, ni los ofendas. Si algo no te gusta de tus hijos, tendrás que decírselo tal como te indican los autores.
El poder de la presencia es un libro que merece un lugar prioritario en tu biblioteca particular si tienes hijos. Te enseña a ser mejor madre, mejor padre si eres varón. La presencia de los padres y madres es muy importante.