Alanís es un pueblo precioso que está a 100 kilómetros de la ciudad de Sevilla. Nos impactó su belleza. Alanis está a pie de unas montañas interminables. No debes perderte sus atardeceres: son de ensueño. Me enamoré más de mi marido viendo caer el sol antes de anochecer. Había unos tonos rojizos en el cielo que parecían salidos de una paleta de acuarelas.
Este pueblo limita con Malcocinado y Azuaga, localidades extremeñas. Alanís sigue siendo un pueblo muy rural. Muchos de sus 1700 habitantes viven de la agricultura. El turismo se vuelve importante en verano cuando regresan vecinos emigrados y visitantes buscando el fresco de la sierra. En verano no parece el mismo Alanís que en invierno.
Nosotros fuimos en invierno. Quería poder disfrutar sus sus calles sin tanta gente. Pudimos ver en nuestro recorrido por Alanís huellas romanas y árabes en sus paredes. Mi marido es un apasionado del Arte. Siempre nos da clases in situ en nuestros viajes, sobre todo cuando vienen las niñas.
Tiene este bonito pueblo un castillo en una cima al sur del núcleo urbano que le encantó a mis hijas. Decían que era un castillo encantado. De origen árabe (anterior a 1392) conserva muros de más de dos metros de anchura testigos de defensa. Mucho trabajo tuvieron los hombres que levantaron aquellas paredes. Desde el casillo se observa gran parte de la sierra. En el castillo celebran las Jornadas Medievales y otros eventos.
Después de ver el castillo, recorrimos La Fuente de Santa María, la Ermita de San Juan y la Ermita de Nuestras Señora de las Angustias. Cansada de ver tanta iglesia, propuse regresar al coche. Mis pies se negaban a dar un paso más por bonito que fuera el pueblo. Andar es muy cansado.
Seguro que volvemos a Alanís. Mi suegra quiere ir a la Romería en honor a María Auxiliadora celebrada el último fin de semana de mayo. Mi santo me propuso acompañar a su madre. Me parece una buena idea. Podemos buscar una casa rural por la zona para estar unos cuantos días.
La primera vez que fuimos a Alanís llevamos la furgoneta que tenemos camperizada. Queríamos disfrutar la naturaleza. Alanís se encuentra rodeada de naturaleza bien cuidada. Es una localidad que apuesta por el turismo rural y cuenta con espacios delimitados para autocaravanas.
Os recomiendo visitar Alanís. Tiene dos rutas de senderismo interesantes: el Sendero del Cerro del Cura y el Sendero Aguardianteros. Es un pueblo donde caminar es una opción a tener en cuenta, tanto dentro del casco urbano como fuera de las calles en las que se apiñan las casitas pintadas de blanco.