El Cerro Gallinero se encuentra en Hoyocasero, Ávila. Está a unos dos kilómetros del pueblo, es plena Naturaleza próxima a la ciudad de Ávila y a la Sierra de Gredos.
En este cerro los artistas crearon un museo cortando arbustos con formas peculiares. Reconozco que tiene su gracia. Lo llaman Arte de Naturaleza.
Está inspirado en el Mayo del 68. Los artistas abrían horizontes, alejándose del arte comercial. Pero no fue un fenómeno masivo. Yo no conocía nada igual hasta que fuimos a ver el Cerro Gallinero. Os aseguro que impresiona.
Mi marido quedó enamorado de la iniciativa. Los artistas que participaron tenían que conocer el lugar. No es un parque de esculturas. Dicen que hacen intervenciones artísticas en la Naturaleza.
Es una manera de potenciar el arte natural. Las obras que más me gustaron eran cien por cien naturales, realizadas con la vegetación.
Me encantó un arbusto cortado con forma de triángulo. Tuvimos la suerte de verlo con florecillas. Florece en blanco y amarillo.
Os recomiendo visitar el Cerro Gallinero. El paisaje que lo rodea es muy bello. Se inauguró en el año 2010. No lleva muchos años funcionando como tal. Pero el número de obras realizadas por los artistas es considerable. Hay mucho que mirar.
Se llevan a cabo en este cerro talleres para personas de todas las edades. También son frecuentes las visitas organizadas de escolares.
Nosotros pensamos volver. Nos gustó mucho. Personalmente pienso que deberían hacer más parques de este tipo. Es una manera de hermanarnos con la Naturaleza, haciendo esculturas vegetales que hay que cuidar recortando continuamente para mantener sus formas.
Las vistas son muy bonitas. Desde el Cerro Gallinero se ve la cuenca alta del río Alberche. Se trata de un paraje bastante solitario. Parece que estás fuera del mundo habitado.
Las esculturas vegetales le dan un aire misterioso y mágico. Mi hija pequeña nos preguntaba cuando venían las brujas. Acabó poniéndonos nerviosos a todos. Las lecturas de Harry Potter le tienen la cabeza comida.