Kemphor es una empresa española que lleva más de cien años en el mercado de los productos relacionados con la higiene dental de niños y mayores.
Los laboratorios Kemphor fabrican y comercializan esta pasta de dientes adecuada para niños de 3 años en adelante. El contenido del tubo es de 50 mL y se encuentra con facilidad en grandes superficies. En Hipercor el pack de dos tubos cuesta unos 5€.
La caja que contiene el dentífrico es alegre y fresca, pero su diseño no es muy infantil. En la caja se indica en español y en inglés que este dentífrico PROTEGE LAS ENCÍAS Y REFUERZA EL ESMALTE DENTAL, y también recomienda, en letras más pequeñas: CEPÍLLATE LOS DIENTES DESPUÉS DE CADA COMIDA Y ANTES DE ACOSTARTE, un buen intento a la hora de concienciar a los niños sobre la conveniencia de una correcta higiene dental.
Estas mismas indicaciones se encuentran en el tubo, flexible, con tapón de rosca y de un tamaño adecuado para las manitas de los pequeños.
En el tubo aparecen tres advertencias más: Una vez abierta, esta pasta caduca en 12 meses y la recomendación de que los niños menores de seis años usen una cantidad del tamaño de un guisante bajo la supervisión de un adulto a fin de minimizar el riesgo de ingestión y la de consultar al odontólogo si el niño recibe un aporte suplementario de flúor a través de otras fuentes.
El gel es de color rosado, y contene flúor y xylitol, para prevenir la caries, reforzar el esmalte dental, proteger las encías y evitar la formación de la placa.
Su sabor es fuerte y me recuerda a la clorofila. En mi opinión, tiene un sabor menos artificial que otros dentífricos infantiles y además, algo muy importante: ¡"No pica"!
Además, cumple perfectamente su función de cuidar la boca de los niños, siempre que, claro está, los adultos estemos pendientes de que se cepillen cuando toca y de que no coman muchas chuches...