El Hotel Santa Clara es un dos estrellas que merece mucho la pena. Está ubicado en pleno centro de Oviedo, por lo que te viene de cine si vas en plan turista a la capital del Principado.
Nosotros estuvimos un fin de semana largo y quedamos más contentos que de otros hoteles con más estrellas.
Es un hotel de sólo 14 habitaciones, coqueto, limpio, sin lujos, pero sí tiene comodidades como una buena conexión wi fi gratis total o ese pequeño recibimiento en forma de caramelos y agua que te ofrecen al llegar. Un pequeño detalle que se agradece. Mis niñas quedaron encantadas con los caramelos.
Lo que eché de menos fue que nuestra habitación no fuera más grande. Nos sentimos casi como en una lata de sardinas pese a que nuestro cuarto era doble. El mobiliario chocaba entre sí.
Menos mal que el cuarto de baño era más de mi gusto. Tenía una bañera, cosa indispensable para mi baño relajante de cada noche.
Nos quedamos a desayunar en el hotel. Nos sirvieron un desayuno bastante decente. La bollería era industrial pero estaba fresca, el café tenía un buen sabor, había fiambre y algo de fruta de temporada.
Volvería a este hotel no tanto por sus instalaciones como por la amabilidad y el buen hacer de su personal. Tenían todo limpio como los chorros del oro. También lo elegiría otra vez por su ubicación. Te ahorras una pasta en transporte porque te queda todo a mano. Además no es un hotel nada ruidoso. El fin de semana que estuvimos nosotros estaba tranquilo pese a tener todos los cuartos ocupados.