Un perfume que me encanta es el Stella Mccartney Stella Eau de Parfum. Fue probarlo en la perfumería y tener que comprarlo o sí o sí.
A mí no me gusta nada el aroma de las rosas; me marea, pero este perfume huele a rosas de una manera tan sutil que me enganchó nada más ponerme unas gotas en la muñeca con el frasco probador.
También me encantó el envase, un frasco de cristal de líneas rectas que termina en un tapón de color negro de forma irregular. Deja transparentar el perfume de color lila. a caja no tiene nada que ver con el frasco. Es blanca con una línea en negro. No conjuntan nada.
Este perfume huele básicamente a rosas con unas notas de ámbar finales que le dan mucha personalidad y lo mismo puedo decir de las notas de esencia de mandarina que percibes cuando el perfume empieza a asentarse sobre tu piel.
La única desventaja que le encuentro al Stella Mccartney Stella Eau de Parfum es su precio. Pagar por un frasco de 100 ml los 100,90 euros que pagué la última vez es una locura en estos tiempos de crisis. Lo primero que hice al llegar a casa fue tirar el ticket de la perfumería. No quería que vieran semejante gasto.
Fue un capricho. Me gusta darme de vez en cuando este tipo de caprichos que me hacen feliz. Nada me alegra más que regalarme cosas caras.
El perfume es sexy, sensual, ideal para salir de noche. Tampoco va mal para el día. Te pulverizas con el Stella Mccartney Stella Eau de Parfum cuando vas con pantalones vaqueros pero arreglada y te sientes ideal.
Yo os lo recomiendo mucho. Si te lo puedes permitir, tienes que comprarlo porque es un perfume que nos gusta a muchas. Mis amigas también acabaron comprándolo todas desde que me lo olieron a mí.