Revitalizing Supreme Eye Cream es una crema de contorno de ojos en textura bálsamos que trata todos los signos de la edad sin centrarse en ninguno. Es de la misma línea que la crema global antiedad, lo que significa que es una crema todo terreno que trata ojeras, bolsas, hidrata, difumina líneas y previene el descolgamiento.
Esta crema tiene una textura en bálsamo. A simple vista parece un poco densa, pero en cuanto la pones en la piel parece calentarse y se absorbe enseguida, dejando la piel elástica y suave, con mucha luminosidad.
Lo que más me gusta de esta crema es que es de efecto visual inmediato. Nada más aplicarla notas como si la piel del contorno de estirase. Las líneas parecen rellenarse. Yo creo que es precisamente por esa textura en bálsamo que ayuda al efecto relleno. Las pequeñas líneas se difuminan, no se si ocurrirá lo mismo para las arrugas marcadas. Supongo que no, pero es que esta crema no está orientada a contornos con arrugas, sino para contornos de ojos que necesitan un poquito de tratamiento.
Aparte del efecto relleno gracias a los difusores ópticos, también se nota una luminosidad inmediata y una mejora en el tono de la piel. Realmente levanta el color oscuro de la ojera y no sólo visualmente como lo haría un corrector, sino que va tratando la zona para que las ojeras se vayan difuminando.
Nada más aplicarlo el contorno de ojos se ve más descansado y las sensaciones contribuyen a ese descanso. La piel está elástica y relajada, súper cómoda y como llena de agua, independientemente de las horas que hayas dormido.
Y ahora llega lo mejor de este producto y por lo que recomiendo que lo compréis a pesar de que no es precisamente barato. Su precio está en los 56 euros por 15 ml, que es el tamaño típico de los contornos de ojos. Este contorno de ojos se puede usar como mascarilla de hidratación. Te pones una pequeña cantidad en la zona del contorno, lo dejas actuar 2 minutos y después masajeas para que el restante penetre. El resultado es espectacular, como si te hubieras puesto una ampolla flash en el contorno. Luminosidad y piel lisa, sin rastro de cansancio, ideal para esos días en los que las noches son especialmente cortas.
El único inconveniente, aparte del precio, es el formato y es que prefiero los contornos de ojos que vienen en tubo, no en tarro pues me parecen mucho más higiénicos. Además, la textura en bálsamo hace que haya que tener cuidado de no coger demasiado producto o demasiado poco pues o bien te durará poquísimo el bote, o no hidratarás lo suficiente. Yo siempre peco de quedarme corta, pero eso tiene solución: Vuelves a coger mas y ya está. Y de esa manera consigo que me dure un poco más y es que es un producto un poco de lujo como para usarlo a lo loco.