El Axis Vermar Conference & Beach Hotel, Póvoa de Varzim es un hotel muy concurrido en temporada alta. Nosotros nunca conseguíamos aparcar en los alrededores del hotel. Teníamos que dejar el coche bastante lejos, lo cual era un lío porque las niñas no hay manera de hacer que anden más de 100 metros sin quejarse.
Encima nos dieron una habitación en la planta 10. digo encima porque los ascensores eran bastante lentos. entre lo que esperabas a que apareciera y el tiempo que le llevaba subir me sobraban los minutos para contarles a mis hijas el cuento de Caperucita dos veces.
Era una habitación amplia y el cuarto de baño era igual de amplio. Nos llamó la atención lo grande que era el plato de ducha. Mi marido decía que lo habían puesto tan grande para que las familias se ducharan juntas debajo del chorro de agua. Nosotros no hicimos tal cosa aunque se podía hacer, sobre todo, si abrías el grifo que había en el techo.
El secador de pelo era muy potente. En menos de cinco minutos tenía toda mi cabellera seca. Con los geles y champús fueron generosos. En este hotel todo es a lo grande.
La habitación me gustó. También me gustó que nos dejaran una cafetera para preparar café e infusiones. Es cómodo y te ahorras una pasta en cafeterías. Como dice mi suegra, no hay nada mejor que un café de casa.
La cama era de matrimonio, enorme. El armario nos llegó aunque le llené todos los estantes. Dentro del armario estaba la caja fuerte. También nos vino muy bien una mesa larga que había donde el televisor. Les hizo de mesa de juegos a mis hijas.
La gran desventaja fue no tener wi fi en la habitación. Nos dijeron en recepción que había, pero la señal no apareció en la casi semana que estuvimos allí. Debía ser una wi fi fantasma.
El desayuno lo servían en la planta baja. Nos pusieron bacon, salchichas, embutidos, frutas variadas, queso y hasta membrillo. El membrillo me hizo recordar las meriendas de casa de mi abuela.
Os recomiendo este Axis Vermar Conference & Beach Hotel, Póvoa de Varzim. Es un hotel con mucho ambiente. Me parece perfecto para unas vacaciones familiares con mucho sol y mucha playa. El hotel tiene una tienda de regalos en la que yo compré regalos para toda la familia.