Para tener las cosas hay que cuidarlas decía siempre mi abuela y no le faltaba razón. Yo conservo su costumbre de cuidar todo. Por eso protejo mi fabuloso HTC Explorer con esta funda de silicona que se adapta perfectamente como si se tratase de un guante. Es ideal: fácil de poner, nada ostentosa. Parece una segunda piel de de tu terminal HTC y lo protegerá de golpes y caídas que siempre sufre por mucho que lo cuides.
Yo la compré negra porque quería dar un toque serio. Las fundas de colores son más informales, y más bonitas también, pero no te dan el aire sofisticado que da siempre el color negro en las reuniones de trabajo.
Me costó 16,70 euros. No me parece cara teniendo en cuenta que ha sido hecha a mano y que el cuero es cuero de verdad.
Las terminaciones están perfectas. costuras procesadas, un cierre con velcro que no pierde fuerza...
La puedes lavar. Yo lo he hecho una vez y no se ha estropeado nada. Eso sí, la lavé a mano. Nada de meterla en la lavadora porque nunca sabes como puede salir por mucho que te digan que es lavable.
No pesa nada. Sólo 37 gramos. Esta también es una ventaja a tener en cuenta. Yo no la hubiera comprado si fuera pesada. soy de las que mira mucho el peso que lleva encima.
Os la recomiendo. Me parece un buen regalo, sobre todo si te lo haces a ti misma. Los regalos que una recibe de sí misma son los regalos que más ilusión hacen.