The Madison Washington DC es un hotel que tiene unas habitaciones muy cómodas en comparación con las de otros hoteles de Washington.
Está a unos diez minutos de la Casa Blanca. Es un hotel perfecto para ir en plan turista por la capital de Estados Unidos.
La decoración de este hotel es muy de palacio, sobre todo en las habitaciones. La nuestra era grande, con una cama de matrimonio inmensa, unos sillones que parecían sacados de un palacio de Luis XIV. Las pareces estaban cubiertas de tela. El suelo era de moqueta, cosa que no me gustó, pero se veía tan limpio que no parecía ni moqueta.
El cuarto de baño era igual de grande. Más moderno que la habitación e igual de luminoso. Los sanitarios estaban impecables.
Me chifló la terraza que teníamos. Era un lujazo salir por la puerta-ventana y sentarte en una silla y ver toda la calle. Volvería a alojarme en este céntrico hotel sin pensarlo dos veces.
Mi marido fue un par de veces al gimnasio. Lo tenían bien equipado. Menos me gustaron algunas estancias comunes como el comedor donde servían el desayuno, un buffet muy completo. En comparación con nuestra habitación se veía menos señorial, más de comedor de restaurante del montón.
Os lo recomiendo. El hotel se encuentra a 4,8 km de Embassy Row, a 1,9 km de la famosa Universidad de Georgetown en la que estudio Felipe VI, a 2,1 km del monumento a Washington y a 5 minutos de caminata de la estación de metro de McPherson Square. Yo no anduve tanto. Alquilamos un coche para desplazarnos por la ciudad.