Yo siempre llevo un móvil prepago porque así controlo lo que gasto y no me sorprenden con una factura salida de presupuesto. Simyo es una marca de Orange que está operando en el mercado desde el año 2008. No me extraña que continué porque sus precios son bastante competitivos. Te cobran 6 céntimos el minuto (con un cobro de establecimiento de llamada de 18,15) en llamadas, 3,62 céntimos/mb en datos, y 10,89 céntimos por sms., es decir, mensajitos pagados si los prefieres a las apps de mensajería instantánea.
Yo empecé con un bono de diez euros gratis y con cinco euros a mayores porque llegaba recomendada por mi hermana. En todo caso, yo no le hago mucho caso a los precios. Las compañías son todas iguales: parece que te benefician y a las que se benefician son a ellas mismas. Las ofertas y descuentos acaban beneficiando a las empresas, no a los clientes. Son unos simples reclamos.
Lo que sí me importa es la cobertura. Con Simyo me pasa lo mismo que con Orantge: funciona el móvil de maravilla en las ciudades grandes y en los pueblos más o menos habitados, pero en las aldeas que están en valles, la cosa es otro cantar. No hay manera de conseguir cobertura. Tengo mejor cobertura con los móviles de Vodafone y de Movistar.
Pese a todo os recomiendo Simyo. Las ofertas son mejores, pero no debes ilusionarte. Es mejor que estés al tanto de los precios para no llevarte una sorpresa. Yo noto que cuando llamo a móviles de Movistar la tarjeta reduce el saldo una barbaridad. Es como si tiraras el dinero por la ventana.
Lo que también os recomiendo es poner la tarjeta en un móvil libre. Nunca compraría un móvil para Simyo sólo. Si un día te interesa más otra compañía, te vale el mismo móvil. Hay que pensar en tu beneficio, en tu interés económico, no en el de Simyo y de otras empresas de telefonía móvil más o menos famosas.