¡Hola de nuevo!
Ahora quería hablaros de otro de los sitios donde he estado al menos dos veces en mi vida y no he estado más veces porque no es un aeropuerto propiamente de pasajeros, os estoy hablando del aeropuerto de Vitoria.
El aeropuerto de Vitoria es más conocido por todos como el aeropuerto de Foronda, que es el pueblo que más cerca se encuentra de la terminal. Me da un poco de pena hablar sobre él, bueno más que pena me da rabia, os explico un poco mi punto de vista. Resulta que Vitoria es la capital del País Vasco y cada vez que he tenido que hacer un viaje en avión me he tenido que dirigir al aeropuerto de Bilbao para poder coger un vuelo, aun siendo vuelos nacionales. Me parece muy mal porque siendo la capital debería de tener al menos un aeropuerto en condiciones al menos para vuelos nacionales porque se que para vuelos internacionales no nos queda otro remedio que ir a Barajas, pero bueno, no nos queda más remedio que aguantarnos porque el aeropuerto de Vitoria se utiliza más que nada para mercancías, por mucho que nos pese.
Aun así conozco este aeropuerto porque he acudido a él en tres ocasiones. En primer lugar estuve en el mismo para hacer un vuelo a Londres. De las únicas veces que el aeropuerto ha hecho vuelos de pasajeros. Se puso de moda hace varios años lo de Ryanner, esos vuelos que costaban un céntimo de euro y me animé a viajar a Londres. Me salió baratísimo y en una hora y 50 minutos estaba en el país vecino.
La segunda ocasión que he visitado este aeropuerto ha sido para hacer la mayor locura que he hecho en mi vida. Tirarme al vacío desde un avión a 4000 metros de altura para acabar en el suelo abriendo el paracaídas. Tengo que decir que ha sido una de las mejores experiencias que he tenido en mi vida. Acabamos aterrizando en una huerta de un pueblo colindante al aeropuerto, el viento nos llevó hacía el otro lado y nos desviamos solamente un poco. Menos mal que no nos pilló el dueño cayendo sobre sus lechugas, que si no.
Y en tercer lugar, un día una amiga me regaló de regalo de cumpleaños un viaje en avioneta durante una hora para ver desde el cielo la provincia de Álava y sobre todo la ciudad de Vitoria desde el aire.
Esas tres veces han sido las únicas veces que he visto este aeropuerto, lo suficiente para conocerlo bastante bien. Pues bien, este aeropuerto dispone de un aparcamiento en la zona exterior justo antes de entrar en la terminal. El aparcamiento, a diferencia de otros muchos es gratuito. Enseguida llegas a la puerta que da acceso a la terminal y a mano izquierda hay muy pocas ventanillas donde nos facturaron la maleta. Muy cerca de la zona de facturación hay salas de espera y luego una puerta que da acceso a las pistas donde nos metimos al avión andando por la calle. No había ningún autobús ni ningún medio de transporte que nos llevara a la puerta del avión. Como ya he dicho no es un aeropuerto de pasajeros propiamente dicho y eso se nota en sus instalaciones. Además es un aeropuerto bastante pequeño, un poco antiguo. Lo que más me gusta de él es la torre de control.
A mano izquierda dentro de las pistas, hay naves grandes donde guardan las avionetas. Esto lo descubrí cuando viajé en avioneta y cuando me tiré en paracaídas. A mano derecha están todas las naves y camiones que llevan la mercancía. Para acceder a estas naves hay que presentar el DNI en una caseta que hay de seguridad de la guardia civil, si no, no te deja entrar.
Eso sí, dicen los expertos que el aeropuerto de Vitoria es el que mejores pistas de aterrizaje y el que mejor está para aterrizar puesto que tiene un gran campo de visión y la maniobra de aterrizaje no es nada difícil. Cuando volví de Londres se fueron hasta Miranda de Ebro para dar la vuelta para aterrizar y fue uno de los mejores aterrizajes que he tenido. Por la noche es una pasada verlo con todas las luces de las pistas encendidas, ¡me encanta!
Un saludo a todos.