No me gusta nada la lencería de Bluebella, una marca de ropa sexy que me desagrada hasta decir basta. Hay lencería negra alegre, pero esta lencería de Bluebella parece hecha para las brujas de los cuentos de hadas. Seguro que tendría mucho éxito con la madrastra de Blancanieves.
Mi marido me regaló una porquería de esta y fue directa al cubo de la basura. Una cosa es ponerse sexy para las noches de amor y otra cosa es ponerse vulgar. Ni siquiera los encajes mínimos parecían de buena calidad.
Estuve mirando en la web de Bluebella a ver si había algo que mereciera la pena. No me gusta tirar las cosas que cuestan dinero. Para mí era un regalo, pero mi santo había pagado 42 euros por una prenda íntima que iba directa al cubo de la basura. No había nada que me gustara. Tenían algunos conjuntos mínimos en color blanco y para de contar. Todo era negro cementerio. Negro y feo.
No os recomiendo Bluebella para comprar ropa íntima femenina sexy, esa lencería que compramos cuando estamos un poquito locas de amor cuando no lo estamos tanto, pero queremos darles vidilla a las noches de luna llena. Hay lencería sexy mejor. Los precios tampoco son ninguna ganga. Andan sobre los 40 euros quitando algunos conjuntos de algo más de veinte euros. Te cobran bien cobrada la marca.
Dudo que mi cuerpo vuelva a ponerse algo de Bluebella. cuando no me convence una marca de ropa no quiero nada de ellos ni gratis. Sus conjuntos de mini braguita y mini sujetador están más pasados de moda que las ropa de las chicas de los alegres años 20.