¡Hola a todos!!
De vuelta para Vitoria, después de haber pasado un fin de semana de junio en una casa rural de la comunidad autónoma de Asturias con la intención de realizar el descenso del Sella, decidimos el domingo de vuelta del viaje parar en la localidad de Villaviciosa, ya que nos pillaba bastante cerca de donde habíamos alquilado la casa rural (Arroes). Así realizábamos un pequeño descanso en el camino antes de las 3 horas de viaje que separan Asturias de Vitoria y decidimos pararnos en esa localidad para comer y ya de paso ver un poco el pueblo. Os quiero hablar del Ayuntamiento de Villaviciosa.
Tardamos muy poco en llegar a esta localidad asturiana, encontramos un lugar ideal dentro del pueblo para aparcar todos los coches que íbamos sin necesidad de dar vueltas por el pueblo. Se trata de una explanada que hay dentro del pueblo, con suelo de tierra situado en la calle Marqués de Villaviciosa. Allí enseguida vais a ver muchos coches aparcados, de ese sitio os estoy hablando.
Nosotros dejamos ahí el coche sin ningún problema y nos pusimos a andar por el pueblo buscando un bar medianamente decente donde comer. Encontramos así muchos bares de gente mayor, donde no nos daba muy buena impresión así que andamos más y más. Deciros que durante ese transcurso, nos topamos con la fachada principal de la casa consistorial de Villaviciosa.
El ayuntamiento de Villaviciosa, se encontraba muy cerca de donde aparcamos, exactamente en la avenida del generalísimo vamos a encontrar una pequeña plaza y justo detrás de esa pequeña plaza se eleva ante nuestros ojos la fachada del edificio.
El edificio consta de dos plantas, la planta baja está representada por cinco alargados arcos que dan paso a la entrada principal del edificio. En su segunda planta tiene ventanas amplias y alargadas como los arcos de su planta baja y en lo más alto el reloj.
Detrás del mismo nos vamos a encontrar con un pequeño parque y alrededor del ayuntamiento tenemos las viviendas de los ciudadanos de este pueblo con sus tiendas, bares y restaurantes de la zona.
La verdad que me gustó mucho el tiempo que estuvimos en ese pueblo, comimos en un restaurante unos escalopines con queso roquefort para chuparse los dedos y el ayuntamiento, pues sí, me gustó, es de lo mejor que se puede ver en esta localidad.
Un saludo a todos.