La crema casera Gallina Blanca es la crema que tiene más azúcar añadido. Tanto da la variedad que sea. Comparas con cremas de otras marcas y las notas más dulces, tanto que casi empalagan. Por eso casi nunca las compro. Sólo las traigo cuando está en casa mi madre. Mi progenitora es fan de esta marca.
Estas cremas de Gallina Blanca no hace mucho que están en el mercado. No se deben vender mucho porque más de una vez las he visto en los supermercados con ofertas de dos por una. Deberían mejorar la elaboración.
Las venden de calabaza, de calabacín y de verduras. Me quedo con la de verduras. Las de calabacín y calabaza son demasiado dulzonas para mi gusto. Es una pena que se les vaya la mano con la cantidad de azúcar que le echan. La de calabaza tiene el doble que la misma crema de calabaza en marcas de distribuidor. Por ejemplo, que la de la marca de distribución del Gadis.
Encima no son nada baratas. Como no las encuentres de oferta, no compensa comprarlas. Te cobran 1,72 euros por cada brick. Yo compré la semana pasada la segunda unidad con un descuento del 50%. Me vino bien el descuento. Me salió la segunda unidad a 86 céntimos.
Estas cremas de Gallina Blanca se comercializan en bricks. Son unas cremas que puedes tomar tal cual o calentarlas unos tres minutos en el microondas. Yo, cuando estoy sola, me las tomo tal cual salen del cartón. Me gustan a temperatura ambiente. Esta es la gran ventaja que les encuentro. que se trate de un plato preparado. Hoy en día ni las mujeres ni los hombres tenemos tiempo para cocinar.
¿Son peores estas cremas que las que puedas preparar tú en casa? Seguramente sí. Pero para mí son mucho mejores porque me ahorran tiempo y molestias. La única desventaja importante que les encuentro, como os he dicho, es la cantidad de azúcar que les ponen a las cremas Gallina Blanca. También el precio es una desventaja. Te cobran más que otras marcas.