En el Bosque de Muniellos pasé miedo, no tanto pro el bosque en sí sino por las leyendas que nos contaba un amigo nuestro. No me gustan los cuentos que dan miedo. Y en el Bosque de Muniellos hay muchos cuentos. Es el bosque más mitológico de la Península Ibérica.
Entre leyenda y leyenda contada pro nuestro amigo, pudimos disfrutar de un paisaje lleno de robles, acebos, hayas, castaños... Los árboles se multiplican hasta el infinito en un terreno plagado de subidas y bajadas. Hace falta llevar el calzado adecuado para andar por los caminos del monte e incluso monte a través como quería meternos este amigo nuestro que venía en el grupo de senderistas libres. No creo que vuelva a practicar el senderismo libre. Prefiero el senderismo de rutas marcadas por las autoridades del país.
En el Bosque de Muniellos hay que tener mucho cuidado para no perderte. Hay mucho senderos. Pequeños caminos que no sabes a donde te llevan. Incluso se parecen porque la vegetación que los rodea es repetitiva. Te parece que estás viendo árboles gemelos. Yo me agobié bastante. Menos mal que el amigo de las leyendas conocía la zona. De haber ido sin él nos hubiéramos perdido todo el grupo. Es el riesgo que tiene meterte en un monte silvestre.
Silvestre y peligroso por la fauna que tiene. Cuando vimos un oso a lo lejos casi me desmayo. Mi marido no me había dicho que íbamos a un monte donde había osos de verdad. Yo no me hubiera imaginado nunca que en la Península Ibérica todavía hay osos. Pensé que se habían extinguido. Pues no. ¡Hay osos!
No os recomiendo ni os dejo de recomendar visitar el Bosque de Muniellos. Puedes ir si te animas. El Bosque de Muniellos es la Naturaleza virgen y salvaje de Asturias. Si de mí dependiera lo ajardinaría y le quitaría los osos. No me gustan los animales peligrosos.