¡¡Buenas a todos!!
Hace un par de años esta zona de Portugal fue el destino de nuestras vacaciones. Queríamos combinar playa y sitios para ver y como esta zona está muy cerca de la capital, Lisboa, nos animamos a ir. En esta ocasión me gustaría hablaros de las playas de Costa da Caparica.
LOCALIZACIÓN
La zona de la Costa da Caparica es una zona que se sitúa en nuestro país vecino, en Portugal, exactamente al sur de Lisboa teniendo que pasar el puente del 25 de abril.
Se trata de una localidad costera más bien un pueblo dotado de todos los servicios como tiendas, hoteles, restaurantes, autobuses y demás.
MI EXPERIENCIA PERSONAL
Pues como os comentaba anteriormente, a esta zona de Portugal decidimos ir porque encontramos un hotel barato en esta localidad y nos permitía hacer turismo y disfrutar de la playa del verano.
El hotel elegido daba justo al mar y teníamos vistas a la playa. Os comentaré como fueron nuestros días de playa.
Lo primero que puedo comentar es que la playa es enormemente ancha y grande. Desde la zona de la carretera hacia la zona de la playa estaba facilitada por unos maderos para poder andar mejor y para las sillas de ruedas.
Además, justo a la salida de la arena había las típicas duchas para quitarse el agua salada, pero bien preparadas en forma de vestuarios que nadie te veía cambiarte.
Otra cosa que me sorprendió de la playa es que estaba bastante limpia. No había nada tirado, manchado o cosas que solemos arrojar los humanos. El agua a su vez también estaba limpia sin algas ni objetos extraños.
Eso sí, si algo malo tengo que destacar de estas playas es la temperatura del agua que estaba congelada. No hubo ni un solo día que me pudiese bañar de cuerpo entero porque, aparte que me cuesta, con estas temperaturas tan heladoras peor. Hay que tener en cuenta que da a mar abierto al océano Atlántico y por eso que esté tan fría.
En la playa que nos tocaba en frente del hotel, se formaba un pequeño hoyo donde se quedaba el agua estancada y gracias al sol calentaba un poco el agua y se podía estar ahí jugando con los niños.
De oleaje son unas playas un poco moderadas de hecho se podía ver la presencia de niños surfistas que se ve que vienen a esta zona para practicarlo. Además, un día que madrugamos un poco más de la cuenta para coger un autobús para Lisboa, ya vimos la presencia de varios jóvenes socorristas instalándose en las playas. Según salen los primeros rayos de sol, ahí están.
Es de arena fina y no cuenta con chiringuitos cercanos ni establecimientos playeros que no sean los de la propia localidad. También comentaros que no se masifica de gente como las playas del Mediterráneo así que con los niños se está de lo más tranquilo.
CONCLUSIÓN
Me parecieron unas playas estupendas en cuanto a todo, limpieza, amplitud, calidad y demás. Por supuesto que os las recomiendo.
Un saludo a todos.