¡¡Buenas a todos!!
Como algunos ya sabéis, si habéis leído mis anteriores opiniones, el pasado fin de semana lo dedicamos a pasarlo en familia y decidimos ir a disfrutar de Senda Viva. Cogimos un alojamiento en Castejón y la localidad más cerca que nos pillaba era Tudela, así que aprovechamos para conocerla el sábado por la tarde.
Entre muchas cosas que vimos, esta plaza también fue otra atracción turística que vimos. Os quiero hablar de la Plaza de los Fueros.
CARACTERÍSTICAS
La Plaza de los Fueros se ubica en la localidad de Tudela y representa la puerta de acceso a la zona de la judería y a las calles del casco viejo de la localidad.
Se trata de una plaza del siglo XVII y está presidida por la torre del reloj y tiene la presencia de un quiosco en el centro de la misma.
La funcionalidad principal por la que se construyó fue para una plaza de toros ya que antiguamente se celebraban cerca de la Catedral de Tudela y lo prohibieron por la cercanía de un edificio santo.
MI EXPERIENCIA PERSONAL
Tras andar varios metros por una de las calles peatonales y comerciales de la localidad, sin quererlo nos encontramos de lleno con esta plaza, la plaza de los Fueros.
Lo primero que quiero comentar es que la ubicación de la misma no puede ser mejor ya que es el centro neurálgico de la ciudad, donde más ambiente se percibe y es el punto de encuentro, de reuniones o de festejos de muchos Tudelanos.
En el centro de la plaza, encontramos sin impedimento alguno el quiosco. El quiosco está elaborado con todo detalle, adornado con sus luces, formas y elevado sobre unas columnas con una pared acristalada que se puede ver el fondo.
En épocas de festejos desde este quiosco es donde animan a todos los
presentes en la plaza con sus cánticos y bailes.
Si el quiosco del centro está adornado, el resto de la plaza está adornado con todo detalles al igual que el quiosco central. Podemos ver una plaza con arcos, con otros arcos de mayor tamaño que llegan a calles adyacentes. En cada rincón de cada balcón de la plaza encontramos escudos o animales.
Comentaros también que en la plaza existe la presencia de numerosos bares o restaurantes. Además de sus respectivas terrazas. Existe en particular un restaurante que se llama Topero que destaca por su decorado y por su alta cocina.
Cuando el sol todavía apretaba solamente se veía gente en la terraza que daba la sombra pero a medida que el sol se escondía y llegaba la hora de cenar, la plaza se llenó de gente, las terrazas estaban llenas de gente y los niños jugaban en el quiosco central. Nosotros nos sentamos a tomar algo en una terraza, pedimos dos cervezas y nos costó la consumición 5 euros, me parece un precio un poco abusivo, ya que no deja de ser un pueblo.
Por lo demás esta plaza tiene muy buen ambiente.
CONCLUSIÓN
Por todo esto, os recomiendo su visita y no os quedéis solo con tomar algo en sus locales, sino también admirar el arte y la construcción de la plaza, que no puede tener más detalles.
Un saludo a todos.