Nunca olvidaré Vrangö en Suecia, una de las islas del archipiélago de Gotemburgo. Es una isla fresquita para el verano. Nosotros veníamos muertos del calor de Marbella. Necesitábamos un lugar con fresquito para relajarnos.
En Vrangö en Suecia encontramos tranquilidad, aire puro libre de contaminación, playas con aguas cristalinas en las que nos pudimos dar unos baños en agua fría mucho mejor para la salud que el agua del mar Mediterráneo caliente a más no poder en verano.
Mi marido se animó a acompañarme a una sauna flotante que había en los muelles. Temía no aguantar la calor. No era para tanto. Era una sauna con temperatura muy suave en comparación con las temperaturas que he aguantado en otras saunas. Los suecos van mucho a esta sauna flotante. Dicen que consiguen el equilibrio que necesita su cuerpo, el lagom lo llaman.
Nuestra siguiente experiencia fue ir en kayak por las calas solitarias. Me enamoré más de mi marido navegando en aquella embarcación típica de la isla. Ya echados al mar, nos subimos a un barco de pescadores para pescar cigalas. Los cangrejos yo no los toqué porque me daban miedo. Por la tarde la tripulación del barco cocino el marisco pescado. Toda una experiencia. Estaba tan rico que te chupabas los dedos.
Os recomiendo visitar Vrangö en Suecia. Es una isla libre de coches.Mi marido y yo nos desplazábamos en bicicletas. Recorrimos toda la isla. Lo más bonito fue el sol de medianoche. En Suecia hay mucha luz. Fue una pena no tener tiempo para desplazarnos a las islas de Donsö y Styrsö. Nos dijeron en el aparthotel donde nos alojamos que tienen unos parajes preciosos. Son excursiones que nos quedan pendientes para un segundo viaje que seguro que hacemos para el año, pero llevando a las niñas. Este año no las llevamos porque la mayor no quería subirse a un ferry. Hay que hacerlo para ir desde Gotemburgo hasta Vrangö en Suecia. Pero sólo son veinte minutos de viaje en ferry. No es para tanto.