Lo bueno de estas colas de langostino es que es “calentar y servir”. Te salvan de un apuro si quieres hacer un aperitivo rápido para dos o tres personas ya que el envase es de 105 g.
La presentación es buena, casi parecen hechos en casa.
A mí me han parecido deliciosos pero a mi marido no le han parecido nada del otro mundo.
No me ha gustado mucho que sus ingredientes incluyan sulfitos y glutamato monosódico.
Hay que ir con cuidado porque tienen 1,5 g de sal por cada 100 g (la cantidad máxima recomendada por la OMS son 5 g al día).
Se consideran un alimento ultraprocesado, así que hay que consumirlos con moderación.