La Schellenberg 50711 - Mosquitera, protección anti insectos y moscas para ventanas es un regalo de mi suegra que no me acaba de convencer. La madre de mi marido la coloca en la ventana de la cocina como una experta. Yo me hago un lío con esta mosquitera de cien por cien centímetros.
Lo que me gusta de la mosquitera es la luminosidad que proporciona a la cocina con un color antracita que, dice mi suegra, que va mejor en una habitación que en la cocina. Pero nosotros la necesitamos en la cocina. Es donde entran las moscas y los mosquitos. Proceden del patio de luces horrible al que tiene unas horribles vistas también nuestra cocina.
Lo que es buena es la cinta adhesiva. Tiene pegamento para dar y tomar. Yo tuve una mosquitera que compré en los chinos que se me despegaba el mismo día de su instalación. Esta mosquitera la colocas con la cuchilla que trae en la caja y queda más pegada que un sello en un sobre. El que sea una tela de poliéster tan finita también ayuda. No tiene peso.
Su precio es razonable. Mi suegra me dijo que le había costado 4 euros. No esperaba que gastara más dinero. La madre de mi marido es bastante tacaña a la hora de hacer regalos a una nuera.
Os la recomiendo. Si le coges el truquillo y la colocas bien, es perfecta para evitar que moscas y mosquitos se cuelen por la ventana abierta. Trae una toallita para limpiarla. Todo un detalle. También la puedes limpiar con una toallita húmeda de las que venden para limpiar culitos de bebé.
También os aconsejo limpiar la superficie donde la pegas. Como no esté bien limpia, no se te pega correctamente la cinta adhesiva. Fue lo que le pasó a una amiga mía que compró una cuando vio la mía y la de ella no se le pegaba bien. La cinta adhesiva se pega bien cuando el marco de la ventana está bien limpio.