La cadena sueca de decoración
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Scarlett2000
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Acerca de:Ikea
Ventajas:dichas
Desventajas:dichas
Nos vemos en Ikea, dice una amiga mía aficionada a las compras en la conocida cadena sueca de decoración. A mí me aburre Ikea. Es siempre lo mismo. Miras en una planta los productos, anotas la numeración y vas a buscar a otra planta la caja con el producto elegido. Tengo la impresión que no cambia nada. También tengo la impresión de que todos los Ikeas son iguales. Encima el montaje no es lo mío. Menos es lo de mi marido. Ya he perdido la cuenta de los muebles que hemos acabado tirando por un montaje imposible para nosotros.
Ikea se ha convertido en un gigante. Nada hacía pensar en tanto crecimiento cuando abrieron su primera tienda en el año 1958. Hoy están presentes en unos treinta países. Los bajos precios, en comparación con las tiendas de muebles tradicionales, son el secreto de su éxito.
Lo malo es que lo barato puede salirte caro. Si compras una mesa de comedor a un precio módico, pero no eres capaz de colocale las patas ccorrectamente, has tirado con el dinero. Acabas echando de menos el operario que viene a tu casa a montar los muebles.
Mi amiga Mónica, en cambio, no necesita ayudas con el montaje. Se entiende a las mil maravillas con todo lo que compra desmontado. Yo en Ikea sólo compro velas perfumadas para el cuarto de baño, menaje de cocina y cojines. Los muebles de Ikea los compro muy de cuando en cuando, y siempre que compro un mueble, llamo a un profesional para que se ocupe del montaje.
Lo que no dejo de visitar en los Ikeas cuando voy con mis amigas o con mis hijas es su restaurante. Tienen desayunos muy baratitos. Hay que ahorrar. Sólo por los desayunos y meriendas baratas os recomiendo ir a Ikea. También os recomiendo entrar en un Ikea por sus productos. Yo nunca salgo sin comprar algo. Si no es una vela, es un cojín y, si no es un cojín, son unos platos.
Ikea se ha convertido en un gigante. Nada hacía pensar en tanto crecimiento cuando abrieron su primera tienda en el año 1958. Hoy están presentes en unos treinta países. Los bajos precios, en comparación con las tiendas de muebles tradicionales, son el secreto de su éxito.
Lo malo es que lo barato puede salirte caro. Si compras una mesa de comedor a un precio módico, pero no eres capaz de colocale las patas ccorrectamente, has tirado con el dinero. Acabas echando de menos el operario que viene a tu casa a montar los muebles.
Mi amiga Mónica, en cambio, no necesita ayudas con el montaje. Se entiende a las mil maravillas con todo lo que compra desmontado. Yo en Ikea sólo compro velas perfumadas para el cuarto de baño, menaje de cocina y cojines. Los muebles de Ikea los compro muy de cuando en cuando, y siempre que compro un mueble, llamo a un profesional para que se ocupe del montaje.
Lo que no dejo de visitar en los Ikeas cuando voy con mis amigas o con mis hijas es su restaurante. Tienen desayunos muy baratitos. Hay que ahorrar. Sólo por los desayunos y meriendas baratas os recomiendo ir a Ikea. También os recomiendo entrar en un Ikea por sus productos. Yo nunca salgo sin comprar algo. Si no es una vela, es un cojín y, si no es un cojín, son unos platos.
Fecha:11:46:48 13/07/20
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Votos:no disponible.
Categorías:Hogar
Etiquetas:Ikea, tiendas, hogar, decoración, muebles
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