No insultes, gilipollas de Malbert es un best seller, a juzgar por la lista de libros más vendidos en Amazon. Este hombre debe estar contento. Yo lo conocía del Youtube. Hace vídeos de opinión homosexual en un hablar por hablar que le genera suscripciones y visitas.
No sigo su canal. Ves un vídeo y ya tienes bastante. No es lo mío lo suyo. Reconozco que tiene cierta originalidad. También tiene valentía. De insultar sabe mucho. De ahí el título del libro. Es un título un tanto engañoso. Lo ves y piensas que es una recomendación que hace el autor. Nada más lejos de la realidad. El título es lo que le dicen a él: que no insulte. En su canal de Youtube no hace otra cosa que no sea insultar. Los que se llevan buena parte de su colección de insultos son sus seguidores.
No insultes, gilipollas es un libro que recibirían gustosos los adolescentes. Malbert es un chico famoso en las Redes Sociales, sobre todo en el mundillo homosexual. Un hombre que mezcla una cara barbuda con unas uñas pintadas de color negro no los deja indiferentes. Muchos lo admiran.
Lo que yo no admiro es su manera de hablar. Insultar por insultar no me gusta. En el libro intenta tocarnos la fibra sensible contando privacidades que a mí no me interesan, pero seguro que a los adolescentes que se aproximan a la pluma les interese lo que cuenta este famosito de las Redes Sociales.
No os recomiendo el libro ni os lo dejo de recomendar. A mí me lo regalaron. Hay gente a la que le parece que me gustan cosas que no me gustan. Malbert no me gusta. Si se quitara los insultos, los malos modos, la falta de respeto hacia sus seguidores, podría aguantarlo. Así no. El respeto es fundamental. No entiendo a las personas que no respetan a su clientela. Malbert es lo que es gracias a las personas que ven sus vídeos y le dan likes en todas sus Redes Sociales.
En lo que estoy de acuerdo con este joven es que resulta difícil estar en el escaparate del famoseo de Internet. Quema. Pero él debería estar por encima de lo que opinan de su persona. Como bien dice, hace lo que hacemos las amigas en privado: criticar.