El calamar Patagónico Pereira es un calamar que no está nada mal. Mi suegra no quería comprarlo porque decía que venía de Argentina y que Argentina está muy lejos. Lejos o cerca, el calamar es bueno. Sale delicioso si lo sabes preparar
Yo cogí dos bolsas. Son bolsas de 800 gramos. Me costó cada una 5,49 euros. Todavía tengo una bolsa en el congelador. Preparamos entre mi madre y yo una bolsa rellenando los calamares con sus propios rabitos. Es una receta de mi progenitora que gusta mucho en casa. Mi suegra también estaba invitada, pero no quiso quedarse a comer. Estaba enfadada porque quería que hubiera comprado calamar fresco. Una compra lo que puede. No se debe meter todo el dinero en comida.
Este calamar patagónico o calamar batido sale bueno. Lo seguiré comprando. Por eso os lo recomiendo. Pereira ya era una marca de pescado congelado conocida por mí. Les compro el pulpo gallego congelado. Congelan pesacados de todas partes del mundo. Por ejemplo, la merluza congelada que venden viene del Cabo. La venden en rodajas y en filetes. A mí la merluza me gusta más la de Pescanova que la de Pereira.
El envasado de Pereira es inconfundible. Tienen las bolsas en colores azul verdoso y verde maravilloso. Tienes que fijarte porque el envasado no cambia en función del pescado que envasen. Todos los envases son iguales. Debes mirar lo que pone y fijarte en la foto del pescado.
Yo este calamar patagónico de Pereira lo noto menos duro que el calamar fresco sea patagónico o de aquí cerca. También es cierto que con la receta de mi madre, la del relleno con sus propios rabitos, salen los calamares y los chipirones deliciosos.
Es una pena que la bolsa no sea de un kilo. Son doscientos gramos menos del kilo. Parece que no, pero se nota. Una bolsa no te da para mucho y si preparas dos bolsas te sobran calamares.