La Guía Repsol 2021 acaba de llegar a mis manos. Es la guía que elaboran a partir del trabajo de 53 inspectores que visitaron los casi 400 restaurantes que aparecen. Los califican con uno, dos o tres soles en función de lo que les gusten.
En esta nueva edición se inventan un nuevo sol: el sol sostenible. Lo recibe Azurmendi, de Eneko Atxa, en Larrabetzu (Vizcaya), un local que mezcla la naturaleza con los productos artesanos. Tiene bien merecido su sol sostenible. Que tome nota la competencia. Este restaurante de nombre difícil tiene un proyecto gastronómico que contribuye a reducir el impacto medioambiental, fomenta el trabajo con productores de cercanía y aboga por la sostenibilidad en su planteamiento de negocio.
La Guía Repsol da muchos soles. En el año 2020 repartió 102 soles nuevos a lo largo y ancho de España. Extremadura fue la única Comunidad Autónoma que se quedó sin soles. Melilla tampoco recibió ningún sol. Si miras las Comunidades Autónomas con más soles encuentras a Cataluña, Andalucía, Madrid y el País Vasco. Esto es previsible. Si buscas soles en Galicia, el Culler de Pau en O Grove, Pontevedra, tiene tres soles. Mi marido está loco con este restaurante. Quiere ir a comer tan pronto podamos acercarnos por allí. Lo tiene difícil porque O Grove está cerrado perimetralmente estos días.
Os recomiendo la Guía Repsol y sus soles. Si no sabes dónde comer, le echas un vistazo y vas al restaurante más soleado que tengas cerca. Puede que no aciertes. Mi experiencia me dice que hay restaurantes con mucho soles en esta guía que no merecen ni un solo sol. Para gustos colores.
Lo mejor de la guía es que le da vidilla a los restaurantes. Los que reciben soles se ponen en el punto de mira de muchos clientes. Falta les hace. La hostelería lleva un año nefasto con la crisis sanitaria del coronavirus. Me gusta tener a mano la Guía Repsol. No siempre sabe una en qué restaurante comer. A veces voy a algún restaurante recomendado en la guía con los soles para comprobar si es merecedor de la distinción. Como os decía, no siempre merecen los restaurantes los soles que les ponen los amigos de Repsol.