El adolescente que admiraba a Hitler
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Scarlett2000
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Acerca de:Memorias de un exnazi [David Saavedra]
Ventajas:dichas
Desventajas:dichas
Memorias de un exnazi de David Saavedra es un libro de memorias de un hombre que estuvo veinte años enganchado a la ideología nazi. En este libro nos cuenta como cayó en el nazismo y también nos cuenta como salió.
David era un chico de Pontevedra normal. Tenía 14 años, era un adolescente normal, le gustaban los juegos de ordenador y las videoconsolas. Su adolescencia normal cambia el día en que ve a su padre mirando en la televisión un documental sobre la Segunda Guerra Mundial. ¿Quién es el hombre que da el discurso? Le pregunta a su padre. Es un loco le contesta su progenitor. David se siente atraído por el hombre del discurso, por Hitler. Le fascina como mete a la masa en el bolsillo con sus palabras, le fascinan sus palabras mismas sin entender nada de alemán. Investiga. Encuentra propaganda nazi. Esta propaganda nazi se propaga en su cabeza. Así se cae en el nazismo.
Cuenta David en su libro que lo atrapó la defensa del bien, las ideas sencillas de una ideología que no empieza a hablando de persecuciones. Bien impregnado de la ideología pasa a creer en las conspiraciones judías. Es cuando cambia su apariencia. La estética skin es cosa de la juventud. La deja cuando pasa al activismo político y se hace necesario un look más formal.
David sigue profundizando en la ideología. Compra libros en la librería Europa de Barcelona. Lee libro tras libro de una literatura que sienta las bases del odio. Nada nuevo bajo el sol. Tampoco es nuevo que los padres de David hagan lo imposible para intentar reconducirlo. Fracasan. David está enganchado por el nazismo. Se ríe cuando su padre le pone la Lista de Schindler. No cree nada de lo que cuenta la película.
Era entonces David un joven que creía que merecía la pena rescatar a la gente de la propaganda judía. Se convierte en un destacado orador dentro de la burbuja. David se sincera en este libro hasta el punto de reconocer que sigue estremeciéndose cuando escucha la voz de Hitler.
Os recomiendo el libro para que veáis un caos mental. David está como para ser mirado por un médico. Cuando abandona el nazismo se pasa a lenilismo. Le gustan los extremos y en él los extremos se tocan.
David era un chico de Pontevedra normal. Tenía 14 años, era un adolescente normal, le gustaban los juegos de ordenador y las videoconsolas. Su adolescencia normal cambia el día en que ve a su padre mirando en la televisión un documental sobre la Segunda Guerra Mundial. ¿Quién es el hombre que da el discurso? Le pregunta a su padre. Es un loco le contesta su progenitor. David se siente atraído por el hombre del discurso, por Hitler. Le fascina como mete a la masa en el bolsillo con sus palabras, le fascinan sus palabras mismas sin entender nada de alemán. Investiga. Encuentra propaganda nazi. Esta propaganda nazi se propaga en su cabeza. Así se cae en el nazismo.
Cuenta David en su libro que lo atrapó la defensa del bien, las ideas sencillas de una ideología que no empieza a hablando de persecuciones. Bien impregnado de la ideología pasa a creer en las conspiraciones judías. Es cuando cambia su apariencia. La estética skin es cosa de la juventud. La deja cuando pasa al activismo político y se hace necesario un look más formal.
David sigue profundizando en la ideología. Compra libros en la librería Europa de Barcelona. Lee libro tras libro de una literatura que sienta las bases del odio. Nada nuevo bajo el sol. Tampoco es nuevo que los padres de David hagan lo imposible para intentar reconducirlo. Fracasan. David está enganchado por el nazismo. Se ríe cuando su padre le pone la Lista de Schindler. No cree nada de lo que cuenta la película.
Era entonces David un joven que creía que merecía la pena rescatar a la gente de la propaganda judía. Se convierte en un destacado orador dentro de la burbuja. David se sincera en este libro hasta el punto de reconocer que sigue estremeciéndose cuando escucha la voz de Hitler.
Os recomiendo el libro para que veáis un caos mental. David está como para ser mirado por un médico. Cuando abandona el nazismo se pasa a lenilismo. Le gustan los extremos y en él los extremos se tocan.
Fecha:15:17:09 30/05/21
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Votos:no disponible.
Categorías:Educación
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