El Expo Hotel Valencia es un tres estrellas carente de lujos, pero con alguna ventaja importante cuando vas en familia de vacaciones.
Entre esas ventajas apreciables por una familia con nios de corta edad yo destacaría las camas supletorias que te ponen. La de nuestra habitación era una cama de verdad. En el mismo cuarto estuvimos cuatro personas cómodamente porque la habitación era grande. Cabían tres camas y una cuna sin estrecheces.
Lo que menos me gustó fue la lentitud de los ascensores. El hotel tiene 378 habitaciones en plantas y estaba muy concurrido. Te desesperabas esperando por el ascensor.
Este hotel está bien comunicado con el resto de la ciudad. Justo por delante pasa el bús que te lleva a la Ciudad de las Artes y las Ciencias.También hay una parada de metro próxima.
Para ir de tiendas no hace falta desplazarse mucho. Allí mismo hay un centro comercial en el que tienes de todo.
Quedé contenta con el servicio recibido en este hotel de la Avenida de Pio XII. No es un hotel que se haya remozado reciéntemente, y lo necesita, pero todo está muy limpio, tanto las habitaciones y cuartos de baño como las zonas comunes.
Otra ventaja a tener en cuenta son los precios módicos que cobra, tanto por la estancia como por las comidas
Tampoco puede cobrar mucho dadas sus carencias. Entre ellas destacaría la mala insonorización que tiene. Nos llegaban hasta nuestra habitación los ruidos del tráfico y los ruidos de las habitaciones vecinas.