El arroz es un cereal muy saludable para el organismo que, además, tiene un alto valor energético. Existen catalogados más de 8.000 tipos de arroz, aunque desde el punto de vista de la calidad culinaria se dividen en tres grupos fundamentales:
- De grano redondo: tienen tendencia a aglutinarse después de la cocción.
- De grano semilargo: similar al de grano redondo.
- De grano largo: quedan muy sueltos después de la cocción, por ello su consumo aumenta de día en día, aunque su precio es más elevado.
Cualquiera de estas variedades puede ser integral o blanco, pero en España el arroz integral, a pesar de que es nutritivamente superior al blanco, es mucho menos consumido.
Además de sus muchas cualidades nutritivas, el arroz es muy versátil, estupendo en una dieta equilibrada y sana y de fácil preparación. Por eso, no es de extrañar que sea un cereal primordial en nuestra dieta, además de la base fundamental de toda una cultura de 5.000 años de antigüedad. Todo ello da origen a una amplísima variedad de recetas.
SOS Cuétara S.A. fabrica y comercializa el arroz SOS en bolsitas de cocción. Para su venta se presenta en una caja de 375 g. repartidos en 4 bolsitas de cocción, transparentes y con pequeños agujeros que permiten el contacto del arroz con el agua, de 93.75g cada una, cantidad que, supuestamente, da para dos raciones, en mi opinión, un poco escasas.
El arroz que contiene cada bolsa es finito y de grano largo y en un lateral de la caja está la explicación de cómo se prepara:
1. Se echa la bolsita en una cacerola en agua hirviendo con sal.
2. Se deja hervir 7 minutos.
3. Se deja escurrir la bolsita con el arroz.
4. Se abre la bolsa y se sirve.
Realmente es fácil y rápido tener un arroz blanco que, francamente, queda bien cocido y muy sueltecito, sin apelmazar.
Sin embargo, encuentro varios inconvenientes:
1º. El precio: Sale caro. Frente a los 90 cent que cuesta un kg de arroz SOS tradicional, la caja de 375 g. cuesta 1.75€ en Hipercor y 1.60€ en Ahorramás.
2º. No supone un ahorro de tiempo tan grande como para pagar ese dinero, ya que previamente hay que hervir el agua en la que echar la bolsita.
3º. Al abrir la bolsita para vaciar el arroz, la bolsa está muy caliente y hay que tener mucho cuidado para abrirla sin quemarte.
4º. El resultado es un poco insípido.
Creo que sólo es práctico para los verdaderamente negados para el arte culinario. Los demás, mejor que cozáis el arroz a la manera tradicional.