Las melenas largas tienen el gran problema de que se enredan un montón, con lo que corres el riesgo de estropearlas dando tirones con el peine o cepillo.
Yo recurro mucho a desenredantes como el Revlon Flex & Go.
El Revlon Flex & Go es ideal porque te deja el cabello sedoso, suave, sin nudos, fácil de peinar.
Te lavas la cabeza y con la cabeza bastante mojada te lo aplicas. Previamente hay que agitar la botella para que se unan sus dos colores: el blanco que acondiciona y el rosa que nutre el cabello. Yo me doy un suave masaje y lo dejo unos minutos. Después me peino la melena sin sufrimientos. Nada de tirones. El peine o el cepillo se deslizan por mi pelo como por una pista de hielo.
Os lo recomiendo. Hace años que lo uso de manera habitual y no me ha dañado nunca la melena, al contrario. Me deja el cabello más brillante, con mejor aspecto, más nutrido.
No lo uso todos los días, por supuesto. Me lo pongo como mucho dos veces a la semana porque no me gusta abusar de productos químicos por buenos que sean como es el caso.
Lo único que no me gusta de este acondicionador es que sea tan líquido. Se te escurre entre los dedos cuando te lo aplicas. Encima es bastante pringoso.
Tampoco me gusta su envase. Crece de dosificador. Por eso siempre gasto más de la cuenta. Menos mal que no es nada caro. El frasco de 400 ml cuesta 4,55 euros.