Hace años que uso las Veet Bandas de Cera Fría. La primera vez que las compré era una adolescente y las dejé aparcadas en el cuarto de baño porque no aguantaba el dolor. No es que fuera para tanto, pero una no estaba acostumbrada a los tirones. Entonces me decantaba por cremas depilatorias.
Ahora prefiero la cera fría. Resulta mucho más práctica cuando vas de viaje porque te permite depilarte en cualquier sitio.
Lo malo es que el precio de estas bandas es algo elevado. La caja de 12 bandas cuesta 3,65 uros. Más caro te sale ir a la peluquería a depilarte, pero tienes que tener en cuenta que una caja puede no llegarte para las dos piernas, como es mi caso. Encima sólo te vienen dos toallitas por caja y eso no da para nada.
Otra desventaja es que la depilación resulta algo agresiva para la piel. a mí me deja la piel seca y necesito aplicarme tras la depilación una crema hidratante. Más coste.
Aun así prefiero mil veces las Veet Bandas de Cera Fría a la cera caliente. En 15 minutos tengo las dos piernas depiladas en un proceso limpio que ahora ya no me duele tanto porque doy mejor los tirones.
Aplicar las bandas es muy fácil. Las calientas entre las manos, te las pegas a las piernas, las dejas como un minuto y las arrancas de un tirón. Casi todos los pelos salen pegados al pegamento de la banda. Pero siempre te va a quedar algún pelillo. Yo esos pelos que me quedan los elimino con unas pinzas.
Lo que no puedes es reutilizar la banda. Una banda usada ya no te arranca más pelos. No pierdas el tiempo.
El vello tarda como dos semanas largas en levantar cabeza. Antes de tres semanas necesitas volver a hacerte la cera.
Prefiero las bandas de cera fría de Veet a oras bandas que venden marcas blancas. Las de Veet son mucho mejores; te arrancan más vello y mejor. También noto que me dura más tiempo la depilación que si me depilo con las bandas baratas de la competencia.