El yolado me encanta. A mí me va a cualquier hora del día. Algunas veces me lo sirvo como desayuno, otras como postre, también lo tomo en las meriendas con mis niñas.
Para las niñas compro siempre el de fresa, que le encanta a Patricia, y el de mango, que es el preferido de Paula. Yo me quedo con el blanco. Mi marido se apunta a todos eso que no le gustan nada los yogures. El yolado suele gustar a personas que no te toman un yogur ni que les des un premio, como es el caso de mi esposo.
No te aporta mucha caloría, sólo 100. Tampoco me como muchos. Si tomo uno o dos ahí me quedo para el resto del día.
Lo tomo tanto sin congelar como congelado. Sin congelar sabe muy a yogur. Congelado me sabe más a helado. De ambas formas me gusta. Le noto una textura muy suave, más suave que la de los yogures.
Os recomiendo el yolado. Es el producto ideal para un postre en verano. Además no engorda tanto como los yogures porque tiene menos calorías.
El precio no es muy barato. El pack de 4 tarrinas te sale en dos euros. La marca Danone siempre supone precios algo mayores. En todo caso, no estamos hablando de un precio prohibitivo.
Esta semana he comprado un nuevo sabor: el maracuyá. Está delicioso. Es el sabor nuevo que ha salido este año. Cuanto más frío me lo sirvo más me gusta.
Mi marido algunas veces mezcla el yolado con helado de tarrina. Yo no me apunto a tanta innovación . Prefiero tomar el yolado tal cual viene en la tarrina.