No me gustó el L'hotel L'amour de París. El amigo que se lo recomendó a mi marido para unas vacaciones románticas no acertó con mis gustos. Me sentí incómoda. Tanta referencia sexual explícita me hacía sentir como pez fuera de agua.
El Hotel De L'Amour está situado en Prakhon Chai, en Buriram, y ofrece piscina al aire libre y centro de spa, un spa que es lo mejor del hotel, pese a la decoración que tiene. El establecimiento alberga un bar y proporciona Wi Fi gratuita en todas las instalaciones, habitaciones incluidas. La de nuestra habitación iba rápida como una moto.
Fue una pena que no me gustara nada la decoración. Nos quedamos allí porque habíamos conseguido un buen precio. París es muy caro. Si estuviera en España, hubiera cambiado de hotel. Aquella habitación con parte de las paredes de ladrillo descubierto a modo de adorno no me agradaba. Encima era penumbrosa. No sé por qué asocian el amor con la falta de luz. Las habitaciones son iguales. No hay donde elegir. Todas ellas disponen de televisor de pantalla plana, hervidor de agua y baño privado con albornoces, zapatillas y artículos de aseo gratuitos en cantidades más que suficientes. Algunas de ellas incluyen una zona de estar, como la nuestra. No nos faltó espacio.
Para gustos colores. Que a mí no me haya gustado no quiere decir que a ti no te guste. Lo que sí debes tener es un coche alquilado para desplazarte cómodamente. El Hotel De L'Amour se encuentra a 10 minutos en coche del parque histórico Phanom Rung y del parque histórico Prasat Muang Tam y a 20 minutos en coche del circuito internacional de Buriram. Mi marido quiso ir a ese circuito. Por eso nos vino de cine tener un coche alquilado.
Lo que más me gustó de este hotel fue la bañera de aptas que había en el cuarto de baño. Bañera de princesa decía mi chico. Metida en la bañera pasé horas. Me sentía en mi salsa.