No es A Lama un pueblo al que vayas de turismo si sabes que allí está una de las más famosas cárceles de Galicia. Yo fui porque se casaba una amiga que quería casarse, y se casó, en la aldea de sus abuelos maternos. Mi chico no quería ir. Pensaba que iba a haber malos rollos por la zona porque van las familias de los delincuentes a verlos en prisión. No había ningún mal rollo. A Lama es un pueblo de Galicia que no difiere de otros pequeños pueblos de la Galicia interior. Está en la provincia de Pontevedra, pero lindando ya con la provincia de Orense.
Nosotros lo pasamos bien en la boda de nuestros amigos y en el pueblo. Aprovechamos para asistir a la Fiesta del codillo. No sólo servían codillo, es decir, un cocido con patatitas y mucha verdura en las casetas que tenían montadas en la zona del ayuntamiento. También había empanadas y filloas. Yo me puse con las filloas. El cocido no era para mi estómago y la empanada tampoco me va mucho porque tiene cebolla. Tanto me da que sea la empanada de A Lama como empanada de Santiago de Compostela. Pero las filloas me encantan. Las de A Lama están que te chupas los dedos.
Os recomiendo visitar A Lama, sobre todo cuando hay fiestas. La fiesta del codillo es interesante para darte una comilona. Creo que llevan poquitos años organizándola. Espero que sigan haciéndolo. Es una fiesta muy concurrida. A Lama es la capital de la comarca del mismo nombre. Hay verbenas y fiestas locales durante todo el año, sobre todo en verano. Mi amiga va siempre a alguna de estas fiestas. Les encantan los bailes folclóricos que organizan.
No están nada mal los alrededores. Me parecieron ideales para practicar senderismo. También para sacar fotos. Hay unos saltos de agua cristalina en sus ríos que llaman la atención. El entorno natural es muy bonito. ¿Y qué decir de sus gentes? Gente amable con el visitante y con esa tranquilidad que sólo ves en las personas que viven en un entorno rural. No saben lo que son las prisas.