Nunca es demasiado pronto para empezar a preocuparte por los estragos que hace la edad en tu piel. Yo llevo años aplicándome cremas antiedad. Últimamente me estoy poniendo todos los días la Crema Antiedad Regerenist Intensiva Olay, una crema antiedad intensiva tres áreas que hace maravillas en mi piel.
Me noto la piel más suave, más joven, mejor hidratada. Mi piel absorbe muy bien esta crema de textura fina. No importa que me ponga un poquito de más. Suelo hacerlo cuando mi piel está algo seca por los efectos perversos del frío o del calor. Tanto el frío como el sol del verano me resecan mucho la piel. Esta crema facial está pensada para darle un uso diario. Hidrata, reafirma y renueva visiblemente la piel. Como os decía, me gusta su textura fina y aterciopelada.
Os la recomiendo. Vale para piel seca y también para piel mixta. La elaboran con una fórmula con vitamina B3 y aminopéptidos, dos ingredientes de gran eficacia en el rejuvenecimiento de una piel que empieza a sumar años. Libera ingredientes activos hasta en diez capas de profundidad de la piel. Por eso notas que las líneas de expresión van a menos cuando llevas pocas aplicaciones y casi se borran del todo cuando pasas semanas poniéndote esta crema de Olay. La venden en muchos supermercados y grandes superficies.
El precio de esta crema es normal en lo que son cremas antiedad. Incluso podrías decir barato. Me costó el último bote 23,90 euros. Aproveché para comprar una segunda unidad porque tenía un descuento del 70%.
Me gusta en envase, un tarro de cristal color rojizo que cierra con una tapa color plata. Es bonito. Son tarros de 50 ml. Parece que se han puesto de acuerdo todos los fabricantes para ponerles a los envases la misma capacidad. Pronto la acabas si te untas todos los días con ella la cara. Me consuelo pensando que me duraría menos si tuviera una textura menos fluída.