Todo sube de precio y la mortadela no queda atrás. Pagar por un envasado de mortadela 2,29 euros es como para pensarlo. Estoy hablando de la Mortadela Bologna IGP Ferrarini que tanto gusta a mis hijas para sus meriendas. A mí me gustaría más si fuera más barata.
Afortunadamente, en los supermercados suelen hacer ofertas para animarnos a los compradores y compradoras a soltar la pasta. Así fue como conseguí una segunda unidad a mitad de precio en un Supermercado Gadis. No lo pensé dos veces. ¡Venga al carro! Mis hijas me lo agradecerían.
Los envasados son de 100 gramos. Miras la relación cantidad precio y echas las manos a la cabeza. Estás tirando la casa por la ventana comprando un embutido que mi marido dice que no es nada sano. Mi santo le tiene manía a la mortadela. A mí me encanta. La Mortadela Bologna IGP sale a 22,90 euros el kilo. Ni que fuera jamón del bueno.
Os la recomiendo. Es una mortadela que viene cortada en lonchas del mismo grosor medio. Entran unas seis o siete lonchas en cada envasado. Con dos lonchas ya haces un bocadillo porque son gorditas. Esta mortadela tiene un sabor muy a mortadela clásica con sus trocitos de tocino visibles, salpicando el color rosado de la carne. Os lo repito: me encanta.
La única desventaja que le encuentro es su precio. También su envasado podía ser algo mejor. La meten en un envasado barato que está a la altura de su precio.